Durante los últimos diez días los roces que ha habido entre la Administración Distrital de Claudia López y el Concejo de Bogotá, sumado a la decisión del Centro Democrático de declararse en oposición al gobierno de turno, ha llevado a que muchos ciudadanos se pregunten si las relaciones, hasta el momento y perceptiblemente buenas entre ambas partes, comenzaron a deteriorarse.
Aunque la mayoría de los concejales consultados por EL NUEVO SIGLO para dar respuesta a esta inquietud atribuyen los últimos roces más a un tema de mala comunicación y de falta de conocimiento por parte del secretario de Gobierno sobre el funcionamiento del Concejo, lo que sí es cierto es que, desde que la Administración Distrital retiró el proyecto de Acuerdo sobre reactivación económica, la relación entre ambas entidades no parece estar atravesando su mejor momento.
Un gobierno al que no le gusta que le hagan control
El presidente del Concejo de Bogotá, Carlos Fernando Galán, le dijo a EL NUEVO SIGLO que le Concejo le ha dado a la Administración garantías tanto en los debates de control político como en los debates de proyecto de acuerdo, pero “en Bogotá estamos en un liderazgo que percibió, no le gusta mucho que le haga control y eso ha llevado a que puedan generarse discrepancias y situaciones como las que han surgido en twitter y en otros espacios”.
Adicionalmente, al aclarar la diferencia que tuvo con el secretario de Gobierno, Luis Ernesto Gómez, el concejal Galán aclaró que, más que un deterioro de las relaciones, hay un desconocimiento por parte de la secretaría de Gobierno del funcionamiento del Concejo.
“Yo sí percibo que al secretario de Gobierno le hace falta, en cierta forma, un conocimiento mayor del funcionamiento del Concejo, y de cierta forma entender los roles que tenemos frente a la Administración. Eso es importante que lo tenga porque él a veces quiere que actúe y funcione como él lo considere y el Consejo es independiente. Y claro debe tener la misión de apoyar a la Administración en lo que considere acertado, pero también controlarla: esa es su función principal y ahí creo que están fallando”, añadió el concejal de Bogotá para la gente.
Por último, Galán aclaró que la diferencia con el secretario de Gobierno frente al trámite del proyecto de reactivación económica, en ningún momento se vició y se estaba cumpliendo el reglamento.
“Creemos que la Administración, por ese error en los tiempos que cometieron de radicar esos dos proyectos tarde, uno el 11 de agosto y el otro el 19 de agosto cuando las sesiones del Consejo duran 30 días y se pueden prorrogar apenas 10 días, entonces decidió priorizar solamente uno de los dos y sacrificar, por ahora, el proyecto de reactivación económica. En ese marco decidió lavarse las manos para no asumir el costo de un titular que dijera que se hundió el proyecto, sino mejor decir: “Decidimos retirarlo para que no tenga problemas de vicios”, lo cual no es cierto”, finalizó explicando el presidente del Concejo a este Diario.
La concejal de la Alianza Verde, Lucia Bastidas, quien comenzó por referir que una mala relación entre el Concejo y el Gobierno Distrital siempre perjudicará a los bogotanos, también coincidió en que la comunicación con la secretaría de Gobierno debe mejorar.
“Sin duda alguna hace falta comunicación entre el secretario de Gobierno, que es el jefe de las relaciones políticas y las diferentes bancadas. Creo que el secretario debe revisarse en sus relaciones con el Concejo, sean oposición, piensen distinto o sean del Gobierno. En la bancada del Gobierno hay criticas porque no cuentan con ella para explicar los proyectos e incluso los podamos defender.
El Plan Marshall llegó al Concejo de Bogotá y nunca se socializó con la bancada. Hay molestias”, le dijo a EL NUEVO SIGLO la cabildante, quien dijo que ella, por ser independiente, ha sido marginada de las reuniones con el secretario de Gobierno y la Alcaldesa, quienes “decidieron no invitarme. Eso no habla bien de alguien que se dice ser demócrata”.
Adicionalmente, la concejal Bastidas piensa que la Administración Distrital debería reconocer que se equivocó al entregar tarde los dos proyectos de Acuerdo “pero le echan el agua sucia al concejo de Bogotá y a su presidente, que actuó en el marco de la normatividad que rige al Concejo”, finalizó diciendo.
Deterioro sí hay
Por su parte, de acuerdo con el concejal del Polo Democrático, Carlos Carrillo, la relación entre el Concejo de Bogotá y la Administración Distrital sí se está deteriorando, pero de acuerdo con él la alcaldesa ha logrado consolidar tal fuerza al interior del Cabildo, que es hasta cierto punto irrelevante un agotamiento en las relaciones.
“Claudia es una persona extremadamente hábil que ha construido una aplanadora en el Concejo de Bogotá peor que la de Enrique Peñalosa, pero sin tanta burocracia porque opera de una manera distinta. Ella da, pero da ante sus términos. Ella sí es la continuidad de Enrique Peñalosa pero ha logrado jugarse las fichas políticas de una manera tan absolutamente genial, que se vende como la oposición aún cuando le está dando continuidad a prácticamente todo”, le dijo a EL NUEVO SIGLO el concejal Carlos Carrillo.
De hecho, para ejemplificar lo que ha hecho la alcaldesa con las fuerzas políticas en el Concejo de Bogotá, el concejal del Polo llamó la atención de cómo por ejemplo Cambio Radical votó a favor el Plan plurianual de inversiones del presupuesto y de los proyectos estratégicos, precisamente porque hay empatía con el plan de Gobierno de este cuatrienio.
“Eso no tiene ningún sentido. Si uno es oposición uno vota en contra de los proyectos estratégicos y del PDD pero ellos lo votaron a favor porque coinciden con su plan de Gobierno”, precisó el cabildante, quien además, en materia de oposición, dijo que la jugada del Centro Democrático lo que hizo fue darle oxigeno al discurso de la Alcaldesa Mayor.
“El Centro Democrático lo que está haciendo es darle oxigeno con su decisión, porque agudiza esa contradicción con el Gobierno Nacional, que a ella le cae de perlas, porque eso le ayuda a tender puentes con la izquierda. Su único puente con la izquierda es el de ser anti uribista, entonces cuando el Centro Democrático se va a la oposición abiertamente lo que hace, en mi opinión, es darle oxigeno a la Alcaldesa porque ellos no van a hacer la diferencia para hundirle los proyectos: son cinco concejales”, finalizó diciendo el concejal del Polo.