La exjunta directiva de EPM rechazó las afirmaciones del alcalde Daniel Quintero y el gerente de la empresa, Álvaro Guillermo Rendón, en las que se establecía que los anteriores directivos de la organización conocían el dictamen de la reaseguradora en la que indicaba los errores de diseño y construcción en Hidroituango.
A través de una firmada por Claudia Jiménez Elena Rico, Gabriel Ricardo Maya Alberto Arroyave, Andrés Bernal, Carlos Raúl Yepes, Manuel Santiago, Mejia, Javier Genaro Gutiérrez, Federico Gutiérrez y Jorge Londoño de La Cuesta, exgerente de la empresa, negaron estas acusaciones.
Comunicado a la opinión pública frente a declaraciones falsas de Daniel Quintero:
— Federico Gutiérrez (@FicoGutierrez) September 8, 2020
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"No es cierto y son absolutamente falsas las afirmaciones... al manifestar irresponsablemente que la Junta Directiva y la administración de Federico Gutiérrez, escondieron, ocultaron, engañaron y no dieron a conocer el mencionado informe", aseguraron.
Asimismo, negaron que los supuestos hechos denunciados por Quintero fueran para beneficiar a terceros. "Las decisiones y el comportamiento del alcalde y el gerente de EPM están creando un ambiente de zozobra e incertidumbre, quien sabe con que propósitos e intenciones", se lee en la carta.
Además, expresaron que estas declaraciones que ha hecho la actual administración están generando daños no solo para EPM sino también para el futuro de Medellín y agregaron que el informe mencionado como “oculto” fue realizado por la aseguradora, por su iniciativa, a su costo y para su exclusivo uso buscando obtener su propio análisis de la causa-raíz del problema.
En ese sentido, señaló que la empresa facilitó el acceso a toda la información técnica que requirieron. Sin embargo, reiteraron que este informe final, con los resultados de este análisis, no fue radicado en EPM.
"Jamás fue entregado ni conocido por sus directivos o su Junta Directiva, sencillamente porque no tenían derecho a ello", dijeron.
Por lo tanto, la exjunta también aclaró que el único estudio contratado por la organización para establecer la causa-raíz del problema es el de la firma Skava, cuyas conclusiones le sirvieron de base para presentar sus argumentos frente a la aseguradora.
"Luego de concluido el informe de Skava, los reaseguradores, y por lo tanto Mapfre, le expresaron a EPM que el siniestro tenía cobertura por parte de ellos dados los términos de la póliza, incluyendo temas de diseño, mano de obra y materiales y aun con la existencia de posibles errores. Mapfre, bajo las anteriores condiciones y al evidenciar que no existió culpa grave, realizó un pago inicial de USD$ 150 millones", puntualizaron.
Finalmente, en la misiva hicieron un llamado a la comunidad a los medios de comunicación y a las autoridades, para mantener la prudencia sobre este tema y "a ser cuidadosos con la información que reciben, a no dejarse engañar".