La dinámica de la frontera entre Colombia y Venezuela, sobre todo en los pasos limítrofes principales, como los puentes internacionales, sufrirá un cambio a partir de la decisión del régimen dictatorial de Nicolás Maduro de retirar los contenedores que desde hace dos años bloqueaban el paso.
La reapertura de esos pasos fronterizos, aunque a diario miles de personas y grandes cantidades de mercancías han pasado por la infinidad de trochas, sobre todo en los alrededores de Cúcuta, es claro que impone desafíos que van desde una mayor regulación comercial hasta lo típicamente sanitario, dado que mientras en Colombia los porcentajes de vacunación contra el covid-19 están por encima de las 41 millones de dos aplicadas, en la vecina nación las cifras del gobierno chavista al respecto no generan confianza y la oposición señala que el porcentaje de población inmunizada es sustancialmente bajo.
Por lo mismo, es claro que después del retiro de los contenedores ubicados en el puente internacional Simón Bolívar, el tránsito de personas y mercancías por los pasos fronterizos no se abrirá de manera generalizada ni desordenada. Se requieren coordinaciones y verificaciones de seguridad, según lo informó ayer el director de Migración Colombia, Juan Francisco Espinosa.
Por ejemplo, hay dudas sobre el mismo estado físico de los puentes. “… Llevan dos años de peso muerto en ciertos puntos, eso afectó la estructura”, declaró Espinosa.
Explicó que el Gobierno inició verificaciones “que nos permitan un paso tranquilo en términos de seguridad, de bioseguridad, pero también garantizando los derechos de todas las comunidades en la zona de frontera, como también de los diferentes migrantes y, por supuesto, transportadores”.
El lunes se verificó que dos de los tres contenedores ubicados en el puente Simón Bolívar fueron retirados por parte de Venezuela y se espera que este mismo ejercicio se haga con el contenedor restante. Igual debería pasar en los puentes Internacionales Francisco de Paula Santander y La Unidad.
“Se espera que, con el retiro de este grupo de contenedores, el cual se da gracias a la gestión de la Gobernación de Norte de Santander, así como del sector comercial, industrial y de transporte del departamento, Venezuela abra nuevamente su frontera, en un marco de orden y seguridad para los dos países y la región”, expresó Migración Colombia en un comunicado.
La entidad indicó, además, que “Colombia tiene su frontera abierta con Venezuela desde el pasado 2 de junio, tras mantenerla cerrada, debido a la pandemia por covid, por cerca de 14 meses, en un ejercicio de bioseguridad, que buscaba cuidar las personas”.
De acuerdo a Migración, durante el cierre de la frontera con Venezuela, Colombia mantuvo los pasos humanitarios habilitados, priorizando aquellos menores que se encuentran adelantando estudios en Colombia, así como personas con discapacidad o que requerían atención en materia de salud.
“El retiro de estos contenedores permitirá consolidar el trabajo que se viene adelantando por parte del Gobierno Nacional en materia de control y seguridad en la región, evitando que miles de migrantes y familias tengan que exponerse al pasar por sitios no autorizados”, puntualizó la autoridad migratoria colombiana.
De igual manera parece claro que con el retiro de estos contenedores y la reapertura formal del cruce limítrofe se abre una puerta para el reabastecimiento de miles de familias venezolanas y, por supuesto, para la reactivación económica responsable de la región y del país.
Como se dijo, todos estos procesos se harán de forma gradual. Migración Colombia señaló que “el tránsito de personas se mantendrá bajo el actual sistema de pico y cédula implementado por la autoridad migratoria colombiana desde el mes de junio, con un horario de operación, en los puentes Internacionales con Venezuela, de 6 de la mañana a 4 de la tarde y los protocolos de bioseguridad acordados con la Secretaría de Salud departamental”.
Adicionalmente, el propio presidente Iván Duque dio instrucciones para fortalecer el control en pasos regulares e irregulares, con presencia adicional de miembros de la Fuerza Pública y Migración Colombia.
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¿Restablecimiento consular?
Al mismo tiempo, el gobierno Duque está dispuesto a reabrir los servicios consulares en Venezuela si hay las condiciones de seguridad necesarias para garantizar la actividad. Esto, sin duda, se trata de un paso adelante sobre todo teniendo en cuenta que Colombia no tiene ninguna relación con el gobierno Maduro y reconoce, al igual que otras cincuenta naciones, como presidente legítimo de esa nación a Juan Guaidó.
“Nosotros estamos abiertos a que si hay las condiciones y si hay las garantías se pueda restablecer ese servicio consular. Pero, obviamente, sobre la premisa de que existan todas las garantías en materia de seguridad”, declaró Duque.
Explicó que en los últimos dos años Colombia mantuvo abiertos los servicios, “a la luz de la Convención de Viena porque eso es un servicio sobre todo para el ciudadano que se encuentra en otro país”.
“Nunca cerramos los servicios consulares. Los servicios consulares se cerraron porque fueron expulsados los cónsules de Colombia en territorio venezolano”, señaló el Mandatario.
Agregó que se está haciendo una revisión de los puentes que estaban obstaculizados para ver si no hay daños estructurales, “y así también poder mejorar las condiciones de vida de las poblaciones de frontera”.
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Buen recibo
La precandidata presidencial uribista, Paloma Valencia, escribió en su cuenta de Twitter: “Excelente noticia la reapertura de la frontera en Cúcuta con Venezuela. Ojalá de restablezca el comercio en beneficio de ambas naciones”.
“Nosotros tenemos un gran aprecio por esta región y por todo lo que le ha servido al partido y además por los importantes aportes que hacen diversos sectores económicos pero que están atravesando una profunda crisis. Creo que es el momento de que se contemple la posibilidad de que se pueda generar este paso con seguridad y garantías para los ciudadanos que por muchos años han derivado su trabajo de este intercambio comercial”, agregó la también senadora.
Por su parte, los precandidatos presidenciales miembros de la Coalición de la Esperanza publicaron comunicado, uno de cuyos apartes dice: “El restablecimiento de las relaciones fronterizas entre Colombia y Venezuela significa, entre otras cosas, el no seguir condenando a la población de dos naciones hermanas a acudir a trochas y pasos ilegales usualmente controladas por grupos criminales para poder transitar, pues no solo nos une una relación económica, sino también social, política y cultural”.
Agregaron que reiteraban “la necesidad de restablecer las relaciones consulares y estamos comprometidos con buscar iniciativas que ayuden a recuperar de manera pacífica la democracia en el vecino país. Es urgente renunciar a la diplomacia del micrófono y tomar acciones que permitan ejercer control en territorio fronterizo, así como proteger los derechos de la población migrante”.
A su turno, Juan Pablo Celis, representante a la Cámara del Centro Democrático, por Norte de Santander, indicó que “a pesar de las diferencias políticas con Venezuela, siempre hemos buscado en nuestra frontera como pueblos hermanos, mantener intacta nuestra esencia de intercambio cultural y comercial”.
“Por esto, celebramos que autoridades en Venezuela levantaron los contenedores que impedían el paso en el puente Simón Bolívar. Esperamos con esto (que) se logré la reactivación económica, comercial y cultural entre países que toda la vida han sido hermanos”, puntualizó.
Desde Venezuela, el presidente interino Juan Guaidó sostuvo que había “conversado con el presidente Duque sobre la necesidad de la apertura controlada de la frontera y del restablecimiento de los servicios consulares de Colombia en Venezuela, basados en la convención de Viena”.
“Mucho agradecemos al gobierno de Colombia que haya abierto la frontera desde el 1 de junio. Estos gestos protegen a los más vulnerables. Sabemos que el beneficio aumentará con mayor apertura de nuestras fronteras y el regreso de la democracia a Venezuela”, puntualizó.