Las medidas de aislamiento social durante la pandemia permitieron mitigar el aumento de casos de Covid-19, sin embargo, la adopción de nuevas rutinas como el aumento de la exposición a pantallas azules debido al home office, la educación online y las horas frente al televisor o dispositivos móviles, han desencadenado nuevos potenciales riesgos para la salud visual.
Entre los principales resultados del sondeo realizado por Lentesplus.com, que incluyó 600 participantes en Colombia, México, Chile y Argentina, demuestra que el 76% de los encuestados aumentó la exposición a pantallas durante el confinamiento. Un 46% afirma que el tiempo de exposición aumentó entre tres y seis horas, un 29% más de seis horas y el 25% de una a tres horas.
Este incremento, está relacionado con algunos síntomas que las personas han presentado durante el confinamiento, entre los más frecuentes se destaca la sequedad ocular con un 29%, seguido de fatiga o cansancio visual con un 24%, visión borrosa temporal con un 14% y dolor de cabeza al realizar esfuerzo visual con 14%.
Pero, ¿qué efectos tiene este aumento de exposición en la salud visual? Nicole Parra, optómetra de Lentesplus, explica que cuando se realizan actividades excesivas o por un tiempo muy prolongado en visión próxima se puede generar un exceso de acomodación, similar a una contractura muscular que ocurre en nuestro ojo por exceso de trabajo, produciendo síntomas como visión borrosa ocasional o constante al realizar cambios rápidos de lejos o de cerca, ojos rojos, fatiga ocular y dolores de cabeza. Todo esto, también podría influir en el desarrollo de problemas visuales como falsas miopías por malos hábitos visuales y por este sobre esfuerzo que realizan los ojos.
Hábitos en nueva normalidad
El sondeo de la compañía realizó un comparativo sobre los hábitos de salud visual antes y durante la pandemia. Entre los hallazgos se encuentra que el porcentaje de personas que no tenían hábitos de salud visual al usar pantallas por largos periodos de tiempo (30%) se mantuvo durante el periodo de confinamiento, aun cuando la mayoría de las personas afirman haber presentado algún síntoma visual relacionado con el aumento en la exposición a pantallas.
En el comparativo, la mayor variación se registró en tener condiciones de luz apropiadas que aumentó en cinco puntos (del 16% pre-pandemia al 21% en la etapa de aislamiento), que muestra una preocupación por elegir buenos espacios en el hogar para trabajo o estudio.
Conservar la distancia indicada entre la pantalla y los ojos disminuyó en cuatro puntos (del 13% pre-pandemia al 9% en la etapa de aislamiento), mientras que hábitos como pausas activas (con el 21%) y uso de gafas o lentes recetados para la protección ocular (14%) no tuvieron variaciones.
Según un informe de la Organización Mundial de la Salud, se estima que la cifra de personas miopes para el 2025 podría ascender a 324 millones de afectados, asociadas al aumento del tiempo que se pasa en espacios interiores y de las actividades que implican mantener una visión de cerca frente a diversos objetos, incluidas las pantallas.
¿Cómo prevenir las afecciones?
En relación a los tipos de hábitos que se deben tener frente al cuidado de la salud visual a la hora de usar pantallas por tiempos prolongados, la compañía recomienda:
- Tener unas condiciones de luz apropiadas, priorizando la utilización de luz solar natural o lámparas en el espacio de trabajo. Para ello, es importante ubicar el escritorio cerca de una ventana, para que la luz del sol entre por un costado y así se eviten sombras.
- Conservar la distancia indicada entre los ojos y la pantalla: Una distancia de lectura en visión óptima es de 33 a 40 cms en computadores y celulares. Para ver televisión o videojuegos mínimo un metro.
- Realizar pausas activas frecuentemente: Lo recomendado es que, por cada media hora de trabajo en visión próxima, se fije la mirada en un objeto que esté a tres o seis metros para relajar el músculo por cinco minutos.
- Humectar los ojos: Debido a la concentración frente a las pantallas, la frecuencia de parpadeo puede disminuir en un 50% y generar resequedad ocular. Las gotas lubricantes pueden ayudar a disminuir esta sensación y aliviar el enrojecimiento.