Otro partido sin goles se presentó en el Mundial de Catar 2022, esta vez entre el seleccionado de Uruguay, que estrelló dos balones en el palo, y Corea del Sur que también desperdició muchas opciones, en el juego por el grupo H en el Estadio de la Educación.
El juego comenzó con la presión de los asiáticos hacia la portería de Sergio Rochet, quien fue titular por encima de Fernando Muslera, pero sin concretar un remate directo.
A los 19 minutos se dio la primera acción clara de gol, con un balón que le llegó a Federico Valverde en el área, la controló pero le pegó muy fuerte y salió por arriba.
Los coreanos respondieron con dos acciones a los minutos 34 y 39, ambos fueron remates que salieron desviados por Hwahn Ui-jo e Inbeom Hwang.
Poco antes que acabara el primer tiempo, el turno fue para los 'charrúas' de intentar la apertura del marcador y casi lo logran, con el cabezazo de Diego Godín que se estrelló en el palo.
Le puede interesar: Embolo marcó el gol de la victoria: Suiza superó por 1-0 a Camerún
El inicio de la parte complementaria fue el mismo del primer tiempo: presión fuerte de Corea del Sur al área uruguaya y el rival saliendo por medio del contragolpe.
La sustitución de Luis Suárez por Edinson Cavani le dio un nuevo aire a los dirigidos por Diego Alonso, ya que encontraron en el 'matador' a alguien con mayor fuerza en el juego aéreo y conexión con Valverde.
Los 'charrúas' solo debieron aguantar en defensa y salir en contragolpe, así fue como Darwin Núñez apareció a los 63 minutos en una buena acción por el costado, mandó el pase a Luis Suárez y el portero Kim Seunggyu la cortó con su mano.
Después del minuto 75, el partido se fue volcando al 'golpe por golpe', donde los 'charrúas' lo buscaron con balones largos y los 'tigres' por medio de la velocidad, éstos últimos por poco abren el marcador al 77' con un disparo que pasó muy cerca de Cho.
Sobre el final del partido, Uruguay volvió a estrellar un balón en el palo con Federico Valverde, al sacar un zapatazo hacia el travesaño derecho, y 30 segundos después le quedó un buen balón a Son, por regalo de Sergio Rochet por un mal pase, y se fue a un lado del arco.
Con el final del partido, se ratificó un dato muy importante: todo compromiso que no tiene goles a los 45 minutos, termina de la misma manera.