AUNQUE todas las cifras de desempleo dan la sensación entre los colombianos que efectivamente el mayor lastre lo están llevando las mujeres, dando la impresión que una vez están sin empleo se refugian en el hogar sin desarrollar ninguna actividad. Nada hay más lejano a la realidad. Muchas mujeres son emprendedoras y ayudan al hombre al sustento mediante la alternancia laboral.
Si miramos la fría realidad de las cifras reflejan que de un total de 16.510.000 de trabajadores inactivos, el 53,2% corresponde a mujeres, es decir 8.783.000, mientras que los hombres inactivos es de 29% (4787.000). Esta gran diferencia en la inactividad laboral, se suma a la brecha que existe en el desempleo entre los dos géneros.
En octubre, el DANE reporta que la tasa de desempleo fue de 14,7% con 3.652.000 desocupados, de los que el 12,1% (441.892) son hombres, mientras para las mujeres fue 20,8% (759.616).
En el trimestre julio-septiembre 2020, la población económicamente inactiva dedicada a oficios del hogar se ubicó en 46,5% aumentando 5,8 puntos frente al trimestre julio-septiembre 2019, seguido de la población que se dedicó a estudiar 33,9%. Por su parte, la población económicamente inactiva que se dedicó a otra actividad se ubicó en 19,5%. Por sexo, el mayor porcentaje de hombres inactivos se encontraba estudiando 51,2%; seguido por los que se dedicaron a otra actividad 35,6%. Por su parte, las mujeres inactivas en su mayoría se dedicaron a oficios del hogar 63,9%, seguido por las que se dedicaron a estudiar 24,9%.
Emprendedoras
Precisamente en el último rubro de otras actividades, es donde la mujer demuestra que aunque aparentemente está en el hogar, no quiere decir que no se dedique a alguna labor.
Ese es el caso que desde hace años Luz Karime Ramírez, una microempresaria que en las cuatro paredes de su hogar creo una marca, Mime Tortas para surgir como emprendedora. Respaldada por la WWB Colombia, se convirtió en empresaria sin ser una experta en la preparación de tortas.
Hoy en plena pandemia, esta mujer es ejemplo de emprendimiento, como lo registra la Fundación WWB Colombia. Hace 10 no contaba con un local, por eso su casa era el lugar en el que esta emprendedora trabajaba día a día para llevar el más dulce sabor a sus clientes.
Sus primeras tortas no fueron buenas, como ella lo dice, pero esto no la detuvo. ¡Ella siguió intentándolo! Y fue así como decidió empezar a conocer más sobre repostería en diferentes programas de televisión.
Más adelante compró un par de libros para aprender a decorar sus tortas. Sin embargo, Luz Karime además de encontrar la receta perfecta para sus tortas, tomó la decisión de capacitarse para fortalecer sus conocimientos sobre cómo manejar un negocio, y fue así como llegó a la Fundación WWB Colombia.
En la Fundación, Luz Karime experimentó cambios en su vida y en su negocio. Además de aprender a ahorrar o a manejar un computador, descubrió cómo darle un valor agregado a sus productos y a su talento, sin importar que estuviera desempleada y trabajando en su casa. Así mismo y a través de las asesorías empresariales, transformó la imagen de su negocio para que este fuera más atractivo en el mercado.
“En la ruta Yarú descubrí que soy una mujer persistente y aprendí que prestar un buen servicio cuesta, y esto era algo que no tenía en cuenta antes.”
Ahora en la contribución al cierre de brechas de desigualdad para las mujeres y la promoción de su participación activa en el desarrollo económico, son la razón de ser de la Fundación WWB Colombia.
Subsistencia
A partir de un diagnóstico realizado en el marco de la actual pandemia, para conocer la situación, principales afectaciones y aspectos relacionados con la supervivencia y eventual recuperación de los negocios de subsistencia que tienen las mujeres emprendedoras con quienes ha trabajado y trabaja la Fundación, se crea el Plan Reactívate el cual busca promover la recuperación y reactivación de la actividad productiva desarrollada por emprendedoras.
De acuerdo con Daniela Konietzco, presidente de la Fundación “es un plan transitorio de asistencia que hemos creado en el marco de la emergencia social y económica generada por efecto del Covid-19, al cual hemos destinado $5.900 millones para apoyar la recuperación y reactivación de los negocios de las emprendedoras a las cuales servimos, en concordancia con la experiencia y accionar de la organización”.
La investigación realizada como objetivo de entender cómo las afectaciones en el negocio impactan a los hogares y cómo las usuarias viven la actual realidad. De esta manera se construyó una segmentación que da cuenta de los grados de vulnerabilidad de los negocios ante esta crisis global. En ella se abordaron variables como quién asume principalmente el sostenimiento del hogar, la proporción de aportes de la usuaria a los gastos del hogar, variaciones que han sufrido los ingresos del hogar durante la crisis, si negocio está funcionando o no, la relevancia de los ingresos del negocio, entre otros aspectos sociodemográficos.
De acuerdo con los datos obtenidos el 72% de los hogares están compuestos por 2 a 4 personas y el 65% tiene al menos dos aportantes al sustento económico del hogar. El 35% de los negocios antes de la crisis, concentraban sus ingresos por ventas en menos de 1 salario mínimo mensual.
Los negocios
Ahora, a causa de la crisis, el 71% de los negocios se encuentran en un rango de ventas inferior a 1 salario mínimo. El 37% de las personas creen que sus negocios se podrían llegar a sostener entre 1 a 3 meses y el 29% de los negocios de una semana a un mes.
En cuanto a las personas emprendedoras, esta segunda medición arroja que un 83% de los negocios son liderados por mujeres y un 17%, por hombres. El 47,3% de la población encuestada han alcanzado un nivel educativo hasta secundaria completa, sin embargo, el 43% de la población tiene más de 20 años de estar por fuera del sistema educativo formal.
Adicionalmente, el 60% de las personas son mayores de 41 años. El 35% de las personas que se encuentran vinculadas al Plan Reactívate, indican asumir el sustento económico principal del hogar; y con relación con la afectación a los ingresos del hogar a causa de la pandemia, el 73% de los hogares ha tenido una pérdida parcial de los ingresos familiares.
Los negocios vinculados al Plan en su fase 1, se encuentran concentrados principalmente en los siguientes sectores: alimentos (18%), confecciones (16%), servicios personales como peluquerías y estéticas en un 13% y tiendas y misceláneas en un 12%.
Un aspecto destacado que no muestran las estadísticas del DANE es que el 63% de los negocios funcionan en la vivienda ya sea propia o alquilada y las expectativas de recuperación del negocio se encuentran en un mediano plazo (2 a 3 meses) para el 41% de los emprendedores. La mayor necesidad que identifican para reactivar su negocio se encuentra en el fortalecimiento de la gestión comercial (56,2%) y la gestión financiera (23%).
Los otros números
En el trimestre julio-septiembre 2020 las posiciones ocupacionales con un mayor número de mujeres ocupadas fueron Trabajador por cuenta propia (3.151.000), Empleado particular (2.856.000), y Empleado doméstico (433.000).
De otro lado, las mujeres jóvenes desocupadas de 14 a 28 años de edad, corresponden al 42,5% de las desocupadas; mientras que, los hombres jóvenes representan el 39,2% de los desocupados.
Referente a la informalidad, en el trimestre referido en las 13 ciudades y áreas metropolitanas, la proporción de hombres ocupados que eran informales fue de 46,7%, lo que significó un aumento de 3,1 puntos porcentuales comparado con el mismo trimestre de 2019 (43,6%). Entre tanto, la proporción mujeres informales fue de 47,7%, mientras que para el trimestre julio-septiembre 2019 se ubicó en 48,3%.
Para el periodo de análisis, de las 23 ciudades y áreas metropolitanas, las que presentaron mayor proporción de informalidad fueron: Cúcuta A.M. (69,1%), Sincelejo (62,8%) y Riohacha (62,5%). Las ciudades con menor proporción de informalidad fueron: Manizales A.M. (38,9%), Tunja (41,2%) y Bogotá D.C. (41,4%).