Gustavo Orozco Ramírez, presidente de la junta de acción comunal de la vereda San Perucho de Andes (Antioquia) fue asesinado por sicarios mientras rezaba la novena con las familias de la comunidad, en la noche de este jueves.

Con este crimen ya son 24 homicidios de líderes sociales y defensores de derechos humanos este año en el departamento.

Líderes del sector rechazaron este homicidio.

"Hemos realizado algunas recomendaciones al Gobierno Nacional y departamental para que garanticen la labor de la defensa de los derechos humanos. Sentimos un abandono por parte del estado colombiano", dijo Óscar Yesid Zapata, del proceso social de garantías a defensores de derechos humanos en Antioquia.

El hombre de 58 años era reconocido en la zona por su aporte a la comunidad, así como en el corregimiento Quebrada Arriba donde se desempeñaba como gestor de proyectos comunales.

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Las autoridades se encuentran investigando para dar con los responsables del hecho. No obstante, señalan que en esa zona hay fuerte presencia del Clan del Golfo y la guerrilla del ELN. 

Por otro lado, en el sur de Bolívar asesinaron en la mañana del jueves a otro líder social. Se trata de Wilmar Ascanio Angarita, quien se desempeñaba como presidente de la junta de acción comunal de la vereda Alto Cañabraval, jurisdicción de esa población.

El hecho se presentó cuando la víctima desayunaba en un reconocido restaurante ubicado en la avenida Rudas del barrio La Libertad. De repente, llegó un sujeto que desenfundó un arma de fuego y le propinó varios disparos, ocasionando su muerte.

Ascanio Angarita tenía 45 años y también había aspirado al Concejo Municipal de San Pablo por el partido Colombia Renaciente. 

De acuerdo con la investigación preliminar, este homicidio obedece a la presión que el ELN ejerce sobre la población para el control sobre los cultivos ilícitos en el municipio.