La Unidad Administrativa Especial de Aeronáutica Civil “Aerocivil” es una entidad muy querida. La consentida de muchos presidentes de la República. Tal vez porque comparten esa pasión por la aviación…quien sabe. Incluyendo al presidente Petro quien se h dejado ver uniformado como piloto de combate y creo que dio vueltas en el Kfir e incluso ha dicho que debemos desarrollar la industria aeronáutica. Hacer aeronaves como Brasil que nada más ni nada menos tiene a Embraer. Ojalá no se quede en sueños. Es una industria apasionante.

Tengo que reconocer que es un gran acierto designar al Dr. Sergio París Mendoza como director de Aerocivil. (Al menos eso parece ser al momento de escribir esta columna). Es un funcionario de las entrañas de Aerocivil. Un experto a carta cabal. Un gran conocedor y estudioso de los problemas estructurales de la aviación civil. Conoce la misión de la Aerocivil como autoridad aeronáutica: la garantía de la seguridad aérea y la seguridad de la aviación civil. 

Tendrá que enfrentarse al desprestigio por corrupción que en las últimas semanas ha recaído injustamente sobre la Aerocivil. Pues por unos pocos empleados se ha golpeado duramente su reputación. Esta unidad administrativa tiene más de 3.000 empleados y 13 sindicatos. No es una entidad fácil de manejar. Sergio París ha venido liderando el Plan Estratégico Aeronáutico 2030 y estoy seguro de que lograr consolidarlo será su misión.

Este Plan propende por el desarrollo del talento humano en el sector. El desarrollo de la industria aeronáutica para que compita y abra puertas globalmente. Justamente lo que quiere el presidente Petro… Empoderar el Plan de Navegación Aérea (PNA COL) y el desarrollo sostenible de la aviación civil.

Grandes retos por delante. Entre otros solucionar el problema de infraestructura aeronáutica tanto lado aire como lado tierra en el aeropuerto internacional de Bogotá. Lograr simplificar y racionalizar el esquema de costos del transporte aéreo asociado a la carga tributaria parafiscales y de sobretasas a través del desarrollo de políticas públicas.

Pero sobre todo la gran misión es lograr recuperar la autoridad que en materia de transporte aéreo debe ejercer por ley la Aerocivil.

Autoridad que ha sido arrebatada por entidades del sector que le han hecho mucho daño a la industria debido a la falta de conocimiento sobre cómo se debe desarrollar la aviación civil. Y ese “cómo” no es otro que en cumplimiento de los principios internacionales de los cuales Colombia es parte y debe acoger incluso para su aviación local.

El nuevo director de Aerocivil debe tener muy claro que va a dirigir la única autoridad aeronáutica que existe por ley. No hay otra. Y que en consecuencia una de las tareas es recuperar ese talante.

Quedo muy tranquilo con este nombramiento pues a pesar de todo se respetó el carácter técnico que tiene Aerocivil quien cuenta con un capital humano en su mayoría con un conocimiento profundo de la misión de dicha entidad. Eso ya es una garantía.

Desde esta columna le deseo muchos éxitos en su gestión.

juanfelipereyes@hotmail.com