Elecciones animadas

No hay deuda que no se pague, ni plazo que no se cumpla, dice la sabiduría popular. Mañana domingo se pondrá en evidencia este dicho, pues se cumple la cita ciudadana de ir a comprometer su opinión en frente a las alternativas que se ofrecen para integrar una de las ramas del poder público, la legislativa. La Constitución democrática que nos rige propone al país la oportunidad de manifestarse para integrar las Cámaras legislativas cuyo objeto primordial, fuera de otros, es el de estudiar las  leyes a las cuales debemos someternos todos y también reformar la Constitución Nacional que comprende todas las normas básica a las cuales las mismas Cámaras deben someterse, las leyes que dictan y obviamente también todos los ciudadanos. 

Las opciones que se ofrecen en esta ocasión, en cuanto a quienes aspiran a conformarlas, son variadas por la profusión de partidos, disidencias, partidos creados ad-hoc, puede decirse, de manera que la composición será o debe ser un reflejo de lo que es el país. ¿Será esta multiplicidad uno de los resultados de la famosa Constitución del 91? Lo interesante de estas elecciones es que es el preámbulo de la elección de Presidente de la República que tendrá en mayo, dos meses después. Tenemos pues dos citas en la urnas. Sin embargo, éstas pueden llegar a ser cuatro. En efecto, la primera es mañana, la segunda, para los bogotanos será la que se refiere a la revocatoria del alcalde de la ciudad si es que las autoridades judiciales que tienen a su estudio el asunto no disponen otra cosa; la tercera será en mayo para elegir Presidente. Si resulta un candidato con la mitad más un voto de los consignados, ahí paran las citas ciudadanas en las urnas. De lo contrario tendremos que volver un mes después a definir quién será el próximo Presidente entre los dos que hayan obtenido más votos. Tendremos pues en este semestre cuatro compromisos ciudadanos en las urnas. ¿Será esta organización electoral una manifestación evidente y clara del ejercicio de la democracia? Puede que sí, pero un poco demasiado y cansón; se hará presente la abstención en este trote electoral es un tema que los analistas tendrán que estudiar. Otro asunto que se ha venido mencionando es el del voto en blanco que es la deuda que los inconformes se proponen cobrar. Así se cumpliría lo que dice la sabiduría popular.

Lo cierto es que la convención conservadora que eligió como su candidata a Marta Lucía le ha puesto sal y pimienta a este proceso electoral. Su presencia ha dado en qué pensar a los electores que somos todos. Las huestes de Óscar Iván con Uribe al frente, cabeza de lista de la oposición para el Senado, dicen que la campaña en realidad comienza cuando se sepa el resultado del domingo. Razonable la reflexión, aunque los entendidos dicen que los políticos una vez con su curul entre el bolsillo, se desentienden de las elecciones que siguen. Y ellos suelen ser quienes localmente movilizan a sus huestes que pueden estar exhaustas. De todas maneras este proceso que estaba lleno de tedio se ha animado  bastante y se animará más si resulta cierto que el de elección presidencial comienza a partir de mañana domingo.