Amanecerá y veremos | El Nuevo Siglo
Sábado, 6 de Julio de 2019

El sábado pasado la Unidad Nacional de Protección informó que Seuxis Pausias Hernández Solarte, mejor conocido como “Jesús Santrich”, abandonó su esquema de seguridad con paradero desconocido.

Según una nota, que se atribuye al exguerrillero, iba a Valledupar a pasar la noche con un hijo. Sin embargo, a la fecha se desconoce con certeza su paradero y si continuará respondiendo ante la justicia como lo había afirmado en días pasados.

Para algunos esto ya tiene tinte de fuga y los más suspicaces creen que Santrich se encuentra en Venezuela junto con Iván Márquez, amparados por la cobarde actitud del régimen de Maduro.

Es posible que Santrich sabiendo que le esperaba una orden de captura por parte de la Corte Suprema de Justicia por los delitos de narcotráfico de los que se le acusa y de los que se adjuntaron varias pruebas testimoniales de Marlon Marín, sobrino de Iván Márquez y pruebas en video de estos supuestos actos, haya decidido fugarse para evitar su posible ida a prisión.

Ante esto nos surge la pregunta, si la justicia en Colombia no es demasiado garantista con los que quebrantan la ley y muy lenta para responder ante situaciones como estas. Era muy evidente que luego de quedar en libertad y posesionarse como congresista de las Farc, Santrich tenía en la fuga la oportunidad esperada para evadir la justicia. ¿Por qué la Corte Suprema de Justicia no fue más rápida en tomar decisiones frente al caso de Santrich presumiendo el riesgo de fuga que había?

También cabe la ínfima posibilidad de que Santrich continúe respondiendo con la justicia, aunque por lo que se ha visto hasta ahora y por la ausencia con la que ha brillado es muy probable que aquí estemos ante una fuga que era previsible y ante la que se hizo muy poco o nada.

¿Cómo puede afectar esto el proceso de paz? Por ahora si Santrich evade a la justicia como al parecer es su intención se podría dar el mensaje  equivocado a la base de la guerrilla de que es mejor evadir la justicia como Márquez, Santrich y el Paisa que responder por lo que se ha hecho, minando la credibilidad del proceso e incrementando el número de las disidencias.

Amanecerá y veremos se dice popularmente para querer decir que con el tiempo se sabrá que pasara ante un suceso dado. Con el tiempo sabremos con certeza si Santrich decidió evadir la justicia y optar por la clandestinidad o si, contrario a los pronósticos de algunos, seguirá respondiendo ante la justicia.

Por lo pronto todo el país está siendo testigo de cómo un exguerrillero con problemas visuales, acusado de narcotráfico después del acuerdo de paz,  que aparece negociando con cocaína en videos adjuntados como pruebas, evade su esquema de seguridad para perderse en la clandestinidad  sin que el Estado pueda hacer mucho al respecto

Esperamos que con la ayuda de Dios, Santrich no se salga con la suya y pague por los delitos de los que se le acusa. 

@feliperangel81

*Politólogo Universidad del Rosario.