El descuadre
Ahora que la meta del millón de barriles diarios se ha vuelto tan esquiva, Colombia requiere con urgencia aumentar su producción de hidrocarburos, puesto que este sigue siendo su principal renglón de exportación y el mayor generador de divisas, así como también constituye la principal fuente generadora de ingresos para el Estado.
No hay duda, el sector minero-energético se ha convertido en la caja registradora de la Nación y también de las regiones, que tienen en el mismo su principal fuente de financiamiento. Basta con decir que en el año 2013 de los $ 46 billones recaudados por concepto de impuesto de renta $ 13 billones correspondieron a lo tributado por la industria petrolera y si a ello se suman los ingresos por concepto de regalías y dividendos este sector le reporta a la Nación el equivalente al 21% de los ingresos corrientes de la Nación. En total los ingresos provenientes del sector minero-energético le representan al Estado el equivalente a 4.5 puntos porcentuales del PIB.
De modo que la caída en la producción y los precios, como la que se ha venido dando, afecta notablemente las finanzas públicas. Lo acaba de manifestar el ministro Mauricio Cárdenas, “deberíamos ponernos como sociedad es a seguir aumentando esa renta petrolera, porque cada peso que se deje de recibir por esa renta es un peso más que tenemos que cobrar en impuestos”.
Y la única forma de aumentar la renta petrolera es mediante una mayor producción y, ojalá, a mejores precios, para de esta manera tapar el hueco fiscal que acusa el Presupuesto para el 2015, que es de $ 12.5 billones, de los cuales por lo menos $ 3 billones son atribuibles a los menores ingresos esperados el próximo año por concepto del pago de dividendos a la Nación por parte de Ecopetrol.
Ello en razón de que el Ministerio de Hacienda proyecta una caída de la producción de crudo con respecto a la meta del orden de los 75.000 barriles diarios. Es de anotar que por cada 10.000 barriles diarios promedio año menos de producción le representan al Estado, entre impuestos, contribuciones y regalías cerca de $ 301 millardos. De hecho el año anterior se dejaron de producir en promedio 51.000 barriles diarios, debido a los atentados, bloqueos y dilación en la expedición de licencias ambientales.