Andrés Molano-Rojas* | El Nuevo Siglo
Domingo, 13 de Diciembre de 2015

¿Qué pasará?

 “El año próximo será muy interesante en América Latina.  Lástima que interesante no signifique, necesariamente, promisorio”

 

¿Qué pasará cuando Macri descubra el estado real de la economía Argentina y con calculadora en mano empiece a hacer las cuentas para poner la casa en orden?  Qué pasará cuando tenga que pactar con la oposición en el Congreso?  Qué papel jugará Cristina Fernández de Kirchner, que a fin de cuentas abandonó la Casa Rosada con una popularidad que envidiarían muchos de sus homólogos suramericanos?  Será Macri el primer presidente “no peronista”, o acabará imitando las lógicas del Peronismo, aparentemente inherentes al ADN político argentino?

¿Qué pasará cuando la oposición venezolana se vea a sí misma en el espejo?  Cuál de las facciones que la integran terminará por trazar el rumbo a seguir:  la de los “transformacionistas” o la de los “vindicativos”?  Cuánto liderazgo efectivo seguirá ejerciendo Maduro al interior del Chavismo?  Qué tan intensa será la arritmia de gobernabilidad resultante de la cohabitación?  Hasta dónde llegará Maduro con el poder de veto (directo o indirecto) y hasta dónde la oposición con la “contra-revolución” (lo que quiera que eso signifique)?  Qué tan funcional será, cuando llegue el momento otra vez, el arbitraje de los militares?  Cuándo empezarán a abandonar Venezuela los cubanos?

¿Qué pasará con los juegos olímpicos de Brasil?  No con las justas deportivas, sino con la prueba de fuego que enfrenta Dilma Rousseff (la menos popular y peor calificada de los gobernantes de la región), ante la inminencia de un juicio político (impeachment), la ruptura con su Vicepresidente, y los escándalos de corrupción que día tras día adquieren mayores proporciones, mientras la economía del país se contrae un 3 % sin dar señales de despegue?

¿Qué pasará con Evo y su proyecto político?  Cómo balancearán los bolivianos el 21 de febrero la popularidad del presidente (69 %) con las reservas que suscita la reforma constitucional reeleccionista impulsada por quien es ya el mandatario que por más tiempo ha ejercido el poder en toda la historia de la nación andina?

¿Qué pasará con Nicaragua y la quimera del Canal Inter-oceánico?  Cómo resolverá la Corte Internacional de Justicia los trámites preliminares en los dos procesos iniciados por Managua contra Colombia por el presunto incumplimiento del fallo proferido por ese tribunal en 2012 y para obtener la delimitación de la plataforma continental submarina?  Y ¿qué pasará en Guatemala cuando el bienintencionado Jimmy Morales descubra que para gobernar no basta con “no ser corrupto ni ladrón”?

Si 2015 fue un año interesante en América Latina, 2016 promete serlo todavía más.  Lástima que interesante no signifique, necesariamente, promisorio.

*Analista y profesor de Relaciones Internacionales