Benjamín Ardila Duarte, biógrafo de Alfonso López Michelsen, fue recibido como miembro de la Academia Colombiana de la Lengua, que preside Jaime Posada, la semana pasada. Su intervención en la Academia versó sobre García Márquez, colombiano universal. El académico Ardila recordó que prácticamente en todos los países y grandes urbes que ha recorrido, en las librerías experimentó el sano orgullo colombiano de ver exhibidos en las vitrinas los libros del famoso Nobel. Y con vehemencia refutó a quienes dicen que García Márquez no se ocupó de Colombia en su obra. Por el contrario, si alguien se ha ocupado de las costumbres, los sentimientos y la manera de ser de nuestro pueblo y particularmente de los de ancestro caribe ha sido el hombre de Aracataca.

Ardila destacó a su vez la originalidad en la cual este renombrado cultor de las letras, así estuviese en París, Madrid, Roma, Ciudad de México, Caracas o La Habana, desde allí se ocupaba de plasmar en el papel las vivencias de nuestra raza. Con estos temas locales que otros autores desdeñaron por décadas hizo universal el realismo mágico que conquistó la admiración de los lectores del globo.