Carlos Alberto Estefan Upegui‪‪‪‪‬‬‬‬ | El Nuevo Siglo
Martes, 22 de Septiembre de 2015

 

TRABAJO EN EQUIPO

Cadenas productivas

Recuerdo  muy bien, entre los años1999 y 2000 como gobernador del departamento y en conjunto con los agricultores de la región, algunos alcaldes, entre ellos el de Natagaima, y de la mano de la industria como Fibratolima, Texpinal y Fatextol, además de los gremios locales representados en la Asociación para el Desarrollo del Tolima ADT,  y el ministro de Agricultura de aquel entonces, Rodrigo Villalba, promovimos y desarrollamos la Cadena: Algodón-Textil Confecciones, con tanto éxito que después de muchos años de haber caído la producción en el país y habiendo sido este uno de los departamentos de mayor área cultivada, tanto así que al desaparecido Armero se le llamaba la "Ciudad Blanca", volvieron a sembrarse grandes extensiones y a estimularse nuevamente la comercialización de la fibra. Fue un trabajo en equipo, inspirado en el "gana-gana", que llego a convertirse en un ejemplo digno de imitar. No con el apetito voraz de los industriales, ni con artificios para manipular el mercado y justificar veladamente las importaciones.
Se veía venir un futuro promisorio para bien de todos dentro de unas reglas claras y un juego limpio.Desafortundamente, los precios internacionales y otros factores que no voy a analizar, nos jugaron una mala pasada, regresando al escenario desolador y angustioso del que se había logrado salir. Al punto que el área cultivada se redujo a su más mínima expresión, quedando solamente en el recuerdo aquellos tiempos pretéritos durante los cuales en una temporada del año en el interior y otra en la costa, el país entero se movilizaba para la recolección de la cosecha y la dinámica económica fluía en el campo dentro del marco de la legalidad.
Hoy día se exploran medidas e instrumentos de política para ayudar a palear la situación, ojala con éxito. Sin embargo nos preguntamos, ¿dónde quedo el trabajo de la Cadena Algodón-Textil-Confección?
Otras cadenas productivas igualmente inspiradas en el "gana-gana" del trabajo en equipo se crearon luego y operan actualmente.´Entre tanto, su fisonomía y su método de trabajo no son iguales al narrado. Han pasado a prevalecer intereses de la industria en su propio beneficio.
¿Qué puede esperarse entonces, de estas, si  la del algodón donde los acuerdos se cumplían y el beneficio general se imponía sobre el particular, no logró sobrevivir?
Muy grave y preocupante si quienes integran sus Consejos Nacionales como órgano de dirección, no ejercen a conciencia su verdadero papel de integradores; es decir, cada uno aportando lo mejor de sí, pero dentro de un ejercicio de complementariedad y sinergia, sin valerse de las debilidades del otro.
La política de integración de la producción nacional mediante el establecimiento del Programa de Cadenas Productivas del Ministerio de Agricultura de Colombia, no se hizo con el fin de promover la integración de la industria con los proveedores internacionales a base de importaciones; sino para estimular y absorber la oferta nacional. De no ser así, como se dice en el argot popular, mejor "Empaque y vámonos...".
No es reconvirtiendo leche en polvo traída del exterior; no es abasteciendo sin prioridad alguna a la industria nacional con azúcar o aceite importados. No es dándosela a ganar al sector productivo de otros países incluso más ricos que el nuestro donde los productores del sector agrícola no padecen las angustias y las dificultades del nuestro. Es una situación que exige de compromisos integrales; de acciones del Gobierno. No es cuestión para mandos medios. Es un asunto del cual también debe ocuparse muy seriamente el Congreso de la República.