Diego Arango Osorio | El Nuevo Siglo
Jueves, 23 de Junio de 2016

La hora de Hillary

 

EN 220 años de historia republicana de los Estados Unidos, una mujer por primera vez tiene opciones reales de llegar a la Casa Blanca. Hillary Clinton, abogada y politóloga, exsenadora y exsecretaria de Estado, con enorme experiencia en la política desde los 20 años de edad, pues recién graduada se interesó por los temas sociales y políticos, siendo así como conoció a quien es su esposo, el expresidente Bill Clinton.

 

Hillary está familiarizada con el poder y los asuntos de Gobierno, 12 años en la gobernación de Arkansas como primera dama y 8 en Washington, le suman 20 años de conocimiento; 8 como senadora y 4 más en el gobierno de Obama; 8 en su campaña presidencial directa le suman 40 años de gajes políticos. Su más seguro rival, el magnate Donald Trump por el partido republicano, es un aventurero que por ego y pretensión aspira ser presidente. Un hombre sin experiencia, sin manejo político ni mucho menos sensibilidad social, un pendenciero y peligroso hombre arrogante. Trump sabe hacer dinero, este ha sido su móvil de vida, megalómano, arbitrario, autocrático, xenófobo, racista y clasista, se enfrentará a esta experimentada mujer.

 

No está fácil la apuesta para Hillary, pues los norteamericanos no se sienten preparados para elegir una mujer a la presidencia, además los gringos clásicos, los red neck y los conservadores ven en ella una liberal progresista.

Dentro de los problemas de Estados Unidos están las amenazas migratorias progresivas provenientes del mundo latinoamericano, de los árabes y asiáticos, esto es un dolor de cabeza para muchos, entonces su reto está en convencer al típico americano, a las mujeres y jóvenes que voten por ella, pues un hombre mayor y de izquierda como el senador Bernie Sanders ha sido un fuerte rival, como lo será Trump, pues este último ha captado la atención del sector radical de la población estadounidense.

 

Pero para los Estados Unidos y la estabilidad mundial, lo mejor sería Hillary, no solo por sus capacidades, sino por la confianza y equilibrio de la primera nación del mundo, además para evitar que un bárbaro y atrevido político improvisado, desate un gran conflicto con sus intenciones de deportación de los inmigrantes ilegales, principalmente mexicanos y latinoamericanos residentes legales que se verían afectados. A su vez la incidencia en la economía, el comercio y el turismo de ese país, que sufrirían enormes consecuencias por las ideas expresadas por ese candidato de construir un nuevo muro de la vergüenza, la expulsión de millones de personas y las restricciones migratorias. En cambio Hillary es mujer ponderada, analista, sensible a la enorme población de inmigrantes, gran diplomática que sin arrogancia, pero con firmeza podrá llevar las riendas de una nación clave para la humanidad.

arangodiego@hotmail.com