Juan Felipe Reyes | El Nuevo Siglo
Lunes, 11 de Abril de 2016
Tratado de Comercio de Armas
 
Adherir al Tratado de Comercio de Armas es una obligación para Colombia con miras a lo que se viene. El proyecto de ley debe ser aprobado por el Congreso a más tardar el 16 de junio próximo o se hundirá. Este proyecto fue aprobado por la Asamblea General de las Naciones Unidas mediante Resolución 67/ 234B del 2 de abril de 2013 y suscrito en Nueva York, el 24 de septiembre de 2013.
 
Este Tratado tiene por objeto instaurar normas que regulen el comercio internacional de armas convencionales, evitar el tráfico ilícito y prevenir su desvío. La ONU busca que los Estados Parte, como se espera lo sea Colombia, impulsen la cooperación, la transparencia y que los países que participan en el comercio de armas lo hagan de forma responsable. Los Estados Parte se comprometen a evitar la desviación de las armas hacia el mercado negro. Colombia no está ceñida en este momento a ninguna norma similar en esta materia.  Esta norma internacional es crucial para el proceso de paz que se está haciendo en Colombia. De llegar a acordarse algo con los grupos al margen de la ley 
 
¿Tenemos un inventario aproximado de cuántas armas nos entregarían las Farc y el Eln? ¿Sobre estas armas y de ser Estado Parte ya podemos garantizar que no se desvíen a un mercado negro? ¿Si no tenemos un inventario y no las entregan y no adherimos al Tratado’ ¿Qué pasará con esas armas? ¿cómo podemos garantizar adónde van a parar? Por esta razón y en esta coyuntura es que resulta vital para Colombia adherir al Tratado de Comercio de Armas.
 
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¿Cuándo será que este país saldrá de las particularidades y pequeñeces que se olvidan en segundos? Varios ejemplos de las últimas semanas: Tanto bombo mediático a el supuesto atentado a Piedad Córdoba; Los hijos de Uribe ante la Fiscalía; La pelea grosera entre dos senadores: Velasco y López; El Presidente en el tablero mostrándonos cuánto hemos ahorrado de energía; Luis Carlos Sarmiento violando las normas de tránsito y; La marcha del 2 de abril en la que muy pocos saben qué hacían ahí parados ¿defendiendo?. Ese día que podamos salir de particularidades y cosas pequeñas tal vez pensemos en grande, en común, en el interés de todos y Colombia vaya al unísono. Pero para que eso pase  faltan décadas de particularidades.
@ReyesJuanfelipe