La lucha política en España se torna visceral, en la medida que afloran los antagonismos y los desafíos, por lo que no es fácil que el centrismo prevalezca. ¿Se puede ignorar o ser indiferente cuando la izquierda plantea desconocer la propiedad privada? Sea en Madrid, Cuba, Venezuela o Colombia, donde en las zonas rurales las invasiones de las fincas arruinaron a muchos y desataron más violencia. Aquí la izquierda violenta no logró su cometido de tomar por asalto el poder, por cuanto el Estado y los propietarios de la tierra se defendieron. En Venezuela, ni en Cuba, ni Castro, ni Chávez, dejaron conocer antes de llegar al poder -el uno por las armas y el otro por elecciones- su intención de arrasar con la propiedad privada. Al final, el resultado es el mismo.

Cuba gozaba del mejor nivel de vida, mediante el turismo y la producción de azúcar, se multiplicaba el bienestar, había más vehículos por habitante y más televisores que en cualquier otro país de la región, hasta que Fidel hace retrogradar la economía y agobia al pueblo. En el siglo XX se hablaba de Venezuela potencia, hasta cuando entran en crisis las refinerías y de tres millones de barriles se pasa a la caída de la producción y el desastre, hasta el colmo de tener que importar gasolina. En Colombia la exportación de la revolución cubana trajo medio siglo de conflicto armado y atraso en los campos, cuando en paz y de proponérnoslo, nos habríamos convertido en potencia agraria y minera. Además, en algunos casos la violencia que ensangrienta el terruño se da en zonas ricas con minerales estratégicos y miles de hectáreas sin cultivar o con cultivos ilícitos, mientras los habitantes locales padecen la miseria. 

Hoy España involuciona en política o se debate en algunos de los paradigmas anteriores a la guerra civil, ente el comunismo solapado y la lucha por preservar la libertad en democracia. En tal sentido el impulso a la libertad económica y social corre por cuenta de Isabel Díaz Ayuso, presidente del Ayuntamiento de Madrid, a la que los socialistas querían defenestrar mediante una moción de censura. Isabel, al entender la jugada del gobierno central por cuenta del presidente Sánchez y su vice Iglesias, da el paso adelante y convoca a elecciones. La audaz jugada desconcierta al gobierno y deriva en un pulso entre la candidata del PP y el gobernante.  La señora Ayuso, se destaca por ser una ejecutiva de sorprendentes capacidades y notable habilidad en el manejo de la crisis provocada por el covid-19 y las consecuencias económicas y sociales. Mientras Sánchez enclaustra o permitía manifestaciones de sus parciales, así como sofoca de manera impiadosa industrias y comercios, multiplicando el desempleo, la dirigente del PP repotencia la economía, en el entendido que la misma está ligada al tema de preservar la salud.

Arrasar con la economía y las finanzas mediante el paro indefinido, conduce a condenar a la miseria y el hambre al pueblo. Los dueños y empleados de bares y restaurantes en Madrid, están tan agradecidos con el manejo inteligente de la crisis que han sacado la cerveza Ayuso en su honor. ¿Cuál es el secreto de conseguir atacar el virus sin clausurar la economía? Seguir un poco el modelo de Taiwán, hacer exámenes y ubicar a los infectados, aislarlos y curarlos. Además, tuvo la previsión ejecutiva de levantar un hospital de mil camas para afrontar la crisis del en tiempo récord, cuando comenzó a sospecharse la gravedad del malestar por el covid-19 que mina la salud colectiva. La prensa y los socialistas se burlaron de ese esfuerzo hospitalario, que estimaban innecesario, más al multiplicarse las penurias causadas por el virus, todos le dan la razón a la agraciada dirigente. 

La confrontación de Isabel con el gobierno de Sánchez polariza a Madrid y el país, mientras los centristas que hacen el juego a la Moncloa, se desinflan y es posible que ni saquen un diputado en la capital. La derecha inteligente confronta la crisis con estímulos, rebaja de impuestos, busca reactivar la energía nacional, atraer la inversión, multiplicar el empleo mientras los socialistas pretenden arruinar a los ricos y la clase media... El vicepresidente castro-chavista Iglesias, dirigente de Podemos, se retira del gobierno para salvar su partido a punto de naufragar y desafiar a Isabel, que le gana el debate público. Vox avanza con dificultades y se otea una eventual alianza entre ese partido y los populares para gobernar a Madrid, que hoy supera en vigor económico a Barcelona. El impulso que le ha dado Isabel Díaz Ayuso a la política y la economía favoreciendo la salud es tan positivo que su partido crece nacionalmente y aspira a sacar del poder a Sánchez, que se sostiene pactando con los separatistas. Es de reconocer que hasta el momento la confrontación política española transcurre en democracia y paz.