El psiquiatra español Enrique Rojas, Catedrático de Psiquiatría y Director del Instituto Español de Investigaciones Psiquiátricas de Madrid y Presidente de la Fundación Rojas-Estapé, inaugurada en el 2009 para el estudio y tratamiento de los trastornos de la personalidad en personas con pocos recursos materiales, ha publicado dos tipos de libros: unos de temas clínicos, La depresión, la ansiedad, las obsesiones y los trastornos de la personalidad y otros sobre temas humanísticos y de ensayo.
En estos días de reflexión, he subrayado y luego extractado en forma subjetiva y aleatoria y luego organizado alfabéticamente, un conjunto de más de doscientas frases, que he denominado “Las claves del amor”, puesto que Rojas nos acerca mucho a ese sentimiento tan necesario en los tiempos que corren, pero también a la falta del mismo por las constantes rupturas familiares, matrimoniales y de convivencia por las que está atravesando el mundo.
¡Son dignas de lástima esas vidas en las que todo se proyecta hacia afuera! Alexitimia es la incapacidad o dificultad grave para expresar los sentimientos. Amor y trabajo son dos ejes básicos de la vida. Aprender a domesticar los deseos indica equilibrio y sensatez. Aquel valor que nos consigue armonía y equilibrio de los apetitos, ordenándolos de acuerdo con la razón y la voluntad, es la templanza. Cada biografía es como un gran río a donde van a parar pequeños afluentes que le dan hondura a sus cauces.
Cada edad tiene unos deseos específicos de felicidad. Cada uno ama según su forma de ser. Cada uno es protagonista de sus pasos. Cada vida humana es una trayectoria dinámica, viva, amplia y plural. Casi nunca vivimos para el presente y relativamente poco para el pasado. Casi todo lo que toca la televisión se convierte en banal. Cualquier contabilidad sobre la propia vida es siempre deficitaria y dolorosa. Cuando la vida tiene un sentido uno es menos vulnerable, tiene más fortaleza. Cuando la vida carece de ese sentido, está siempre amenazada, en peligro. Cuando uno se olvida de ir a lo sustancial, se pierde en lo anecdótico.
Desear es anhelar algo de forma próxima, rápida, con una cierta inmediatez. Querer es pretender una meta más a largo plazo, pero sin la transitoriedad de la anterior, especificando el objetivo, limitando los campos con la firme resolución de llegar a la meta cueste lo que cueste.
Educar es enseñarle al hombre lo que es la vida. Educar es introducir en la realidad con amor y conocimiento. Educar es seducir con los valores.
El “síndrome de amaro” consiste en la tendencia enfermiza a convertir la vida privada rota en espectáculo para distraerse o pasar el tiempo o matar los ratos muertos. El “síndrome de la cebolla” es la secuencia del consumista: Hacer para tener, tener para consumir más; consumir más para aparentar una imagen mejor; disponer de una mejor imagen para hacer más.
Hasta aquí, una corta selección de frases del doctor Rojas, que pueden servir de reflexión, para educar con ética en el amor.