Orlando Cano Vallejo | El Nuevo Siglo
Martes, 28 de Octubre de 2014

Pinta bien

 

Este sábado inicia el último bimestre 2014 con sabor dulce para economía, amargo en política e incertidumbre por el proceso de paz con las Farc. Dos últimos meses para aclimatar seguridad ciudadana, salir del atolladero en movilidad, oxigenar relaciones Gobierno-oposición, concertar salario mínimo con equidad y calmar las aguas en el frente tributario. El fin de año pinta bien en términos de crecimiento, tasa de cambio con más devaluación, estabilidad en costos del crédito, reducción del desempleo, inflación controlada, crecimiento sostenido, menor pobreza y aumento en inversiones sociales y vivienda popular.

Las Mipymes terminan un año decoroso y con aumento en financiamiento, más de 12 billones de pesos este año en créditos respaldados por el Fondo Nacional de Garantías, FNG. Industria y comercio se alistan para cierre de año positivo en ventas, producción, exportaciones, rotación de inventarios y facturación. Los planes de inversión se cumplirán o superarán los presupuestos previstos, pese a factores como inseguridad, costos laborales, contrabando, infraestructura y reforma tributaria.

Los bancos terminarán 2014 con liquidez suficiente para requerimientos de empresas y consumidores. Hay plata para atender la demanda, lo que garantiza el pago de nómina, importación de maquinaria, equipos, y estar al día con proveedores.

Si la concertación sobre salario mínimo para 2015 permite un ingreso justo para trabajadores acorde con posibilidades fiscales del país y de las compañías, el año cerrará aún mejor, con mayor confianza de consumidores y expectativas de crecimiento y creación de empleos. Si reforma tributaria que viene en camino no alborota el ambiente económico ni el ánimo de los contribuyentes, habrá mejores guarismos al final de diciembre próximo.

Si antes de Navidad y año nuevo el presidente Santos anuncia algún avance fundamental y creíble sobre los diálogos con las Farc habrá razones para ser aún más optimistas. Si las riñas Santos-Uribe bajan de tono y hay acercamiento responsable y sensato, el país respirará un mejor ambiente político. Si se logran destrabar mega-obras como el Túnel de la Línea y se precisa el rumbo final de la autopista Bogotá-Girardot, iremos recuperando la fe perdida en nuestra triste aventura entre contratistas e infraestructura.

En la medida que el Gobierno circule los dineros ofrecidos para la agricultura e informe incentivos en 2015 para los cafeteros, campesinos vislumbrarán un mejor futuro, con esperanza de sembrar y certeza de cosechar.

Un punto que hará más claro el porvenir nacional tiene que ver con el trabajo que adelante el Congreso de la República en próximas semanas. Hay proyectos vitales para el desarrollo social, económico, la justicia, la seguridad y las regiones, que deben ser tramitados con oportunidad y responsabilidad. Mejor hacer que decir, mostrar más, prometer menos.