Afganistán debe servir a la humanidad para entender que la solidaridad internacional no existe, que nadie ni nada, así lo queramos, va a cambiar la forma como piensa y le gusta vivir al otro.

Nosotros no vamos a cambiar a Venezuela por más cercos diplomáticos que se hagan. Nadie lo va a cambiar. Así como la guerra contra la droga en Colombia está perdida la guerra contra el terrorismo en Afganistán también está perdida. En ambos casos solo sirve de pretexto para todo lo que nunca se hace.

En el ocaso del gobierno Duque las cosas siguen igual o peor que hace 10 o 20 o quizás más años cuando lo lógico es que mejoren. Las horas para Maduro no estaban contadas como se afirmaba hace tres años, en Cúcuta, ante la presencia del viajero del espacio Sir Richard Branson.

Es el momento de tener estrategias distintas y diferentes que nos saquen no solo del aburrimiento diario de lo mismo de siempre, sino que realmente generen un cambio profundo en la sociedad. Ejemplo: ¿Un Estado por qué tiene que ser manejado por políticos?

Hablar del cambio climático ya no es una novedad. Todo el mundo habla de eso. ¿Qué hay detrás más bien? ¿Qué es ser innovador en un mundo en el cual todos quieren un flash que los ilumine y los deje como los grandes genios únicos e irrepetibles?

Es aterrador como la gente toda quiere demostrarle al otro que es distinta y original y en consecuencia “brillante”. ¡Hace rato no existe nadie brillante! O bueno sí… hace poco veía una entrevista hecha a Charly Alberti, exbaterista de Soda Estéreo. Alberti no solo es conocido por ser un referente en la música sino por ser un visionario de la tecnología lo que lo hizo llegar hasta Cupertino en California invitado por Steve Jobs, por haberse inventado la hora de internet. Dice Alberti que cuando lo conoció le dio su tarjeta y Jobs se quedó mirándola y le dijo: “cool” … ¿La razón? Las tarjetas eran ¡ovaladas! y no rectangulares. Eso deslumbró a Jobs y lo nombró AppleMaster es decir líder global de Apple junto a figuras como Muhammad Ali.

A lo que voy es a que la gente realmente distinta lo es en todo y la mayoría de veces son subestimados. Por eso los computadores Apple son distintos. Los IPhone. Vienen de mentes muy distintas. No son unos followers ni se ha convertido en una réplica de su mentor. Al contrario, se han vuelto su competencia. En fin, la gente exitosa es distinta en todo.

Esto lo llevo al mundo de los Estados. No debemos seguir haciendo lo políticamente correcto que esperan que hagamos. Los discursos deben cambiar y dejar de ser “rectangulares”.

¿Por qué hay que seguir matándonos en el nombre de la moralidad que nos deja luchar contra la droga? El qué dirán internacional económico, político y financiero no nos deja progresar y sobre todo ser verdaderamente libres.

@juanfelipereyes@hotmail.com