“No hay cárceles para tanto delincuente” se dice en este país que, año tras año se enfrenta al mayor desprestigio de la justicia, por vencimiento de términos que dejan en libertad a la delincuencia que crece día a día.
El ministro Osuna, dentro de sus múltiples propuestas para rescatar a Colombia de las garras del delito y la corrupción, ha propuesto libertad para quienes cometan delitos menores, ante la escasez de reclusorios, el hacinamiento y la corruptela de los guardianes. Busca, al mismo tiempo convertir las cárceles en sistemas de rehabilitación, educación y capacitación para que los penados puedan salir y reintegrarse a la sociedad, sin rechazos.
A la par con estos propósitos del titular de la Justicia se debe modificar, con urgencia y decisión, la figura del “vencimiento de términos”, que hoy es una puerta abierta para los delincuentes, especialmente para los de “cuello blanco”.
Día a día los medios de comunicación publican noticias que dejan perplejos a sus lectores, oyentes y televidentes, sobre libertades que logran, por vencimiento de términos, “destacados abogados” para elegantes y encumbrados de delincuentes, que solo pasan por los penales para una reseña, de la que salen hacia lujosas oficinas, mansiones, hoteles o exclusivas clínicas. Los jueces tienen que dejar libres a raponeros y asesinos a los que nadie enjuicia.
El artículo 294 del Código de Procedimiento Penal, garantiza el debido proceso a los sindicados por delitos contemplados en el CPP. La Corte Constitucional expidió una especie de seguro a la rama judicial, al señalar que esta solo podrá aplicar el vencimiento, cuando no cumplan los términos del proceso, por paro judicial.
Sin embargo, el “vencimiento de términos” sirve hoy para burlar la ley, para justificar el delito, para respaldar la corrupción y para cuanta triquiñuela salga de ciertos bufetes de especialistas en la materia.
Existen expertos abogados que todo lo tienen medido, para sacar de la cárcel a intocables y acaudalados clientes.
Esa la razón para que haya cárceles especiales, con cómodas habitaciones, redes de comunicación, clubes de recreación, celebraciones y con salidas a discreción, bajo la tolerancia de directivos y guardianes.
La Corporación Excelencia de la Justicia calcula que durante lo que va corrido de este año, 5.226 delincuentes de todos los estratos, han salido por vencimiento de términos. Ambuila, defraudador de la Dian, “Memo Fantasma”, muy recordado por en edificio de la calle 85, el exgobernador de Santander Richard Aguilar y tantos más celebran su salida.
Nadie sabe hoy cuántos acusados estarán listos para liberarse, de gancho de sus expertos abogados, para los cuales tampoco hay castigo alguno. Se valen de médicos que certifican problemas de salud y demás “fuerzas mayores”, admitidas por los jueces, para conseguir libertades por vencimiento de términos. Así opera nuestra justicia y así se escapa a ella.
BLANCO: Senador Bolívar: prohíben en Colombia las sesys con polímeros. ¡Las planas también tendrán paraíso!
NEGRO: Vecinos de Hidroituango, no creen en los simulacros de EPM.