Líderes indígenas de los nueve países que comparten la Amazonía unieron fuerzas en defensa de su biodiversidad con la creación del llamado G9, "una voz unificada para influir en las decisiones globales", en el marco de la COP16 que se celebra en Colombia.
La exigencia principal "es que los gobiernos de todo el mundo reconozcan que los pueblos tradicionales son las principales autoridades morales cuando se trata de conservar los biomas, proteger la diversidad de especies y regular el clima", explicó la ONG 350.org en un boletín este domingo.
Indígenas de Brasil, Colombia, Perú, Bolivia, Ecuador, Venezuela, Guyana, Guayana Francesa y Surinam lanzaron el sábado el "G9 de la Amazonía Indígena" en la ciudad colombiana de Cali, durante la cumbre mundial que termina el 1 de noviembre.
Es una "coalición regional (...) que aumentará la presión sobre los gobiernos de todo el mundo para que tomen medidas climáticas (...) en una agenda común para llevar a la COP30 de Brasil el año que viene", explicaron en un comunicado.
Los pueblos amazónicos clamaron por la "conservación de la biodiversidad", el respeto de sus derechos en el territorio y una "financiación directa" en compensación por su rol como guardianes de la naturaleza.
El lanzamiento se produce cuando las negociaciones en torno a un nuevo organismo permanente para reconocer los derechos de las comunidades originarias está en discusión.
"Gracias a los pueblos indígenas, se conserva alrededor del 80% de la selva amazónica, una de los mayores fuentes de carbono a escala mundial y una de las zonas con mayor biodiversidad del planeta", aseguró 350.org.
Sin embargo, "los pueblos amazónicos siguen sufriendo persecuciones e intentos de borrar su presencia", continuó.
Debido a la crisis climática causada por la actividad humana, la Amazonía sufre la peor sequía en casi dos décadas, según el observatorio europeo Copernicus.
Del lado colombiano, el caudal del río Amazonas, uno de los más largos del mundo, se redujo hasta en un 90% en algunas zonas por la inusual ola de calor.
La COP16, la más concurrida de la historia, se celebra bajo el lema de "paz con la naturaleza" para dinamizar la aún tímida implementación de la hoja de ruta que se trazó el mundo hace dos años en un histórico acuerdo en Montreal con miras a salvaguardar la naturaleza de aquí a 2030.