Como perderlo todo: dramas del matrimonio por redes sociales | El Nuevo Siglo
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Domingo, 28 de Octubre de 2018

LOS hechos políticos de un año que consideró devastador por sus implicaciones, la fuerza, en muchos casos destructora, de las redes sociales y los estragos que éstas causan en las relaciones personales son el marco de “Cómo perderlo todo”, la más reciente novela de Ricardo Silva Romero.

Crítico del cine, columnista y escritor, Silva Romero, se embarca con esta obra en una aventura de historias tan reales como la vida misma y que va conectando según narra los hechos ocurridos, en el país y en el mundo, en el 2016. Todo ello adobado con el ímpetu de la tecnología, un ineludible del diario vivir y que lleva, incluso –como en esta novela- a poner fin a matrimonios.

La obra trata del  viejo profesor Pizarro, quién ajeno a los odios y las lapidaciones de hoy, publica en su Facebook de principiante un post que pone en jaque su vida. En torno a su debacle se desata una tragicómica novela de relevos protagonizada por turnos. Y el nefasto 2016 se vuelve una prueba para los nervios de varias parejas a punto de caer en sus propias trampas. (…)

El profesor Pizarro cometió un “desliz” o mejor una “imprudencia” que fue castigada sin piedad en el cadalso de las redes sociales. Por desconocimiento, ingenuidad o simple arrebato, pegó en su página de Facebook un viejo artículo de la revista Scientific American que jura por la ciencia que las mujeres que han tenido hijos son de lejos las más inteligentes. “¿Cierto?”, remató Pizarro en un mensaje dirigido a sus setecientos setenta y tres amigos, y lo hizo como preguntándoselo en voz alta. De allí surge un maremágnum que evidencia la histeria y el odio que “reina” en nuestro tiempo.

En pocas palabras, y tal como lo expresó en diálogo con EL NUEVO SIGLO, es como “una novela de relevos, como un mural de esta época asaltada por los celulares, que sucede desde enero hasta diciembre del bisiesto e infernal 2016”.

El autor nos dio detalles de su nuevo libro, su experiencia como escritor y la influencia de las redes sociales de la vida en pareja.

EL NUEVO SIGLO: ¿Cómo surge la idea de su última obra?

RICARDO SILVA ROMERO: El origen del libro está en una serie de historias de parejas que había estado recopilando y luego del impulso de mi esposa, quién me animó a escribirlas. En algún momento pensé que no era una serie de cuentos sino una novela porque a todos les estaba pasando el mismo mundo, que es en el año 2016, tanto aquí en Colombia como en otros lugares.

ELN: ¿Qué pasó en 2016 para que usted basara su obra en ese año?

RSR: Estoy de acuerdo con las personas que piensan que ese año fue devastador y en mi caso particular porque murió mi papá. Entonces es un tiempo que relaciono con lo peor que puede pasar. Pero también recuerdo que nada fue fácil desde el principio: el clima de Bogotá era agobiante, también las cosas políticas que empezaron a pasar, es decir, el ascenso de Donald Trump para llegar a la presidencia en Estados Unidos; en el país la polarización brutal que trajo el plebiscito y que no dejó ganando a nadie, la muerte de una cantidad de artistas importantes y la separación de Inglaterra de la Unión Europea, entre otros hechos. Fueron cosas políticas tan importantes y graves que vamos a estar viviéndolas durante décadas y en el terreno de las personas y de las parejas, que es lo que narra la novela con más atención.

ELN: ¿Qué tanto influye un acontecimiento político de la vida en pareja o en la sociedad?

RSR: Esto es un tema que suele encontrarse en las novelas y me parece que aquí está claro que la vida familiar, de pareja, de puertas para adentro, todo el tiempo está siendo afectada por las noticias del mundo y por los hechos fundamentales de ese año. Esto crea rupturas familiares, románticas y afecta a fondo a las  personas. Hoy,  más aún, como cuenta la novela con mucho cuidado, ya que las redes sociales potencian el pensamiento pero también el enfrentamiento como las barras bravas, el activismo, las discusiones, las peleas entre amigos y todo lo público puede desbaratar la vida de uno en cualquier momento.

ELN: ¿Las redes sociales son un escenario en el que se manifiesta la violencia teniendo en cuenta los niveles de agresividad en la sociedad colombiana?

RSR: Se manifiesta como por un altavoz la violencia, reproduce los ideales de la democracia, donde todos tenemos derecho a una voz, a expresarnos y ser oídos. Pero es decir, son unas celebraciones de los derechos pero no de los deberes de la democracia. Las redes están llenas de gente que comete delitos a diario, que calumnian, injurian, difaman a quien quieren impunemente y cometer delitos es violencia sin duda alguna. Agredir y matonear pues si bien no necesariamente siempre son delitos si son violencia  e intimidación. Las redes sociales estimulan una cosa que es muy colombiana, que es la incapacidad de ser uno mismo sin imponerse o prevalecer.

ELN: ¿Con qué personaje de la vida real identificaría al profesor Pizarro?

RSR: Yo creo que el profesor Pizarro más que una persona concreta es un arquetipo de intelectual que nació como en los años 50, vivió los coletazos de los 60 y luego enfrentó en Colombia cierta falta de libertades que llegó a su cumbre en los gobiernos del Frente Nacional y en los que siguieron hasta el de Turbay, con una presencia de autoridades muy aplastantes y también una tendencia revolucionaria que terminaron fracasando estrepitosamente y rediciéndose a la violencia. Es un tipo que llega demasiado tarde a las redes sociales porque va para 50 años y las utiliza sin tener claridad de lo que está pasando allí.

ELN: ¿En qué género se puede clasificar esta obra?

RSR: Yo creo que es una novela, para empezar, que uno puede alinear más o menos con las novelas corales que están empeñadas en documentar una época y un lugar. Es una especie de mural o una pintura de los comportamientos de estos tiempos y van personaje por personaje.

ELN: ¿Cómo es ser escritor en una ciudad como Bogotá con las circunstancias del día a día?           

RSR: Yo llevo 20 años dedicado a esto, entonces me he creado un hábito y una rutina muy clara de trabajo. Ya llevo tiempo en esto y a la vez he estado trabajando para medios, en El Tiempo, la prensa en general, pues he logrado convertirlo en un trabajo de oficina y vivir muy a salvo del ruido de los afanes de la ciudad. Hoy es mi rutina, con mi familia, que es muy feliz y precisa, que a pesar de ser una vida familiar muy completa, me da tiempo de ir avanzando también en lo que escribo.