Julieth Lozano es la soprano considerada la mejor voz del mundo. Con tan solo 31 años, esta colombiana se ha destacado por su imponente voz en el Royal Albert Hall, en la Opera de la Bastille, Teatro Colón en Bogotá, Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo, entre otros.

Los colombianos la tendrán hoy en vivo y en directo en el Concierto de Fin de Año del Teatro Cafam. En esta oportunidad se ha preparado un repertorio selecto de música clásica junto con la Fundación Orquesta Sinfónica de Bogotá y la Sociedad Coral de Bogotá. De esta forma, el público podrá deleitarse con diferentes estilos compositivos, desde la ópera hasta los cantos histriónicos de la zarzuela y la riqueza de la música colombiana.

En julio pasado, la soprano fue la ganadora del BBC Cardiff Singer of the World Competition y del Premio del Público Dame Kiri Te Kanawa, es decir, fue elegida como la mejor voz del mundo.

En su presentación interpretó Dónde lieta uscì, el aria de Mimì del acto III de La bohème, de Giacomo Puccini, y consiguió el reconocimiento por parte de los votos del público.

Lozano hizo una breve pausa en los ensayos del concierto para conversar con EL NUEVO SIGLO sobre su participación en el concierto de esta noche y en el Festival de Música de Cartagena, a realizarse del 5 al 13 de enero de 2024.

EL NUEVO SIGLO: ¿Cómo será su participación en el Concierto de Fin de Año del Teatro Cafam?

JULIETH LOZANO: En el concierto de esta noche contamos con varias piezas de diferentes épocas y estilos, porque queremos compartir un rango más amplio con la gente para que ellos escuchen desde Mozart, desde música clásica, hasta la zarzuela cubana, pero también una cumbia. Queremos hacer una mezcla mostrándoles la música clásica en otras facetas. Con toda la autoría de grandes compositores como Mozart, Dvorak, Donizetti, Amadeo Vives, Haendel, Strauss y muchos más.

ENS: También estará en el Festival de Música de Cartagena, ¿cómo se alista para ese repertorio?

JL:  En el Festival voy a estar en tres conciertos. El primero es un recital con piano, allí vamos a interpretar todas las canciones del compositor caleño Luis Carlos Figueroa, quien tiene 100 años y creo él estará allá para escucharnos. También vamos a hacer unas mezclas con canciones del cartagenero Antonio Mejía. El siguiente concierto es ese mismo día y el 12 de enero en la noche voy a cantar con la Orquesta Filarmónica Juvenil; el último día vamos a compartir tarima con la Orquesta Sinfónica de Cartagena para interpretar música italiana, serán tres o cuatro números de duetos de ópera italianas.

ENS: ¿Alguna vez soñó con convertirse en la mejor soprano del mundo?

JL:  Yo no me considero la mejor soprano del mundo, incluso cuando escucho eso me siento extraña, porque creo que me hace falta caminar, nunca pensé que la carrera fuera a llegar a este punto, hasta ahora todo ha sido una sorpresa, y eso me causa emoción, porque veo que valió la pena todo el esfuerzo. Si soy completamente sincera, esta carrera no es fácil, no es cantar y ya. Es un camino muy difícil que todavía debe construirse, se necesitan apoyos financieros. He podido lograrlo paso a paso, pulso a pulso, de a poquito, pero he encontrado muchos ángeles en mi camino, por ejemplo, la beca en el Reino Unido, si no fuera por eso no sé cómo hubiera hecho, seguramente hubiera buscado otro camino, aunque no hubiera sido lo mismo.

ENS: ¿Cree que los cantantes líricos colombianos necesitan más apoyo para llegar a donde usted ha llegado?

JL: Es difícil, ya que es una carrera complicada porque todo el tiempo tienes que estar formándote. Además, porque el nivel de estrés, de presión, es alto. Por ejemplo, estamos todos en escena y, en mi caso, con un público de unas 800 personas mirándome, y lo mismo ocurre en teatros mucho más grandes donde hay presión más grande y es algo que uno tiene que cumplir lo más impecable posible. Entonces, se debe contar con un estándar muy alto, es una presión grande, pero además de eso tienes que cuidar tu instrumento, que es tu cuerpo, tu voz, y para eso no puedes andar de fiesta; cuidar mucho la alimentación, la salud mental, emocional y, algo muy importante, para todo eso se requiere una habilidad financiera.

ENS: ¿Qué mensaje les daría a los talentos que van empezando en este camino de la ópera?

JL: Mi consejo es ir paso a paso. Hay que ser perseverante, sin desespero, sin apuros. Esta carrera es de a poquito, porque si uno piensa en el camino y lo difícil que va a ser, no lo hace. Yo no lo hubiera hecho si supiera cómo iba a ser todo esto de duro, pero lo hice porque era un reto, después vino otro reto, entonces iba de a poquitos. Mis metas las iba colocando poco a poco y sin dejar pasar tanto tiempo y sin abrumarme.

ELN: Ha compartido escenario con grandes cantantes clásicos, ¿con quién cree que le faltaría?

JL: Me falta mucho por compartir en el escenario. Hay algunos cantantes que son como mis musas de la música, por ejemplo, me gustaría estar en escena con Sonya Yoncheva, una soprano búlgara que a mi parecer tiene el alma muy honesta y eso lo muestra en escena, se siente que está compartiendo su corazón de verdad. Hay tantos artistas colombianos, por ejemplo, siempre he admirado mucho a Juanita Lascarro, una cantante lírica bogotana con la que aún no he tenido el privilegio de compartir escenario, espero algún día poder cantar con ella.

El concierto

Lozano cantará junto a los más de 70 artistas de la Orquesta Sinfónica de Bogotá y la Sociedad Coral de Bogotá. Además de eso, el concierto contará con la dirección orquestal del maestro Francisco Valero-Terribas, uno de los más aclamados directores contemporáneos de España, quien ha dirigido importantes orquestas alrededor del mundo. 

Todo el repertorio es autoría de compositores importantes como Mozart, Dvorak, Donizetti, Amadeo Vives, Haendel, Strauss y muchos más.