El español no es patrimonio de España y eso es estupendo: Riera | El Nuevo Siglo
Foto archivo AFP
Domingo, 8 de Abril de 2018
Vivián Murcia G.*

CARME Riera (1948, Palma de Mallorca) es una de las escasas mujeres presentes en la Real Academia Española de la Lengua (RAE). Son sólo ochos los sillones ocupados por mujeres de un total de 44 académicos. ¿Por qué tan infrarrepresentadas? ¿Es una institución machista? Riera asegura que no y la equipara a la realidad laboral que viven las mujeres en las empresas: «Le tengo que decir que la Academia, como las industrias del Ibex 35 y como tantos otros lugares a los que nos cuesta llegar, es un reflejo de nuestra sociedad. Cuando las mujeres tengan papeles predominantes, le aseguro que habrá más mujeres en la RAE”.

Hay varios periodistas y gestores culturales que reclaman que la RAE no es precisamente un lugar en el que las mujeres tengan igual representación.

No es del todo cierto. Hay mujeres en la Academia, habrá más, sin duda, porque en este momento hay chicas altamente preparadas en España que entrarán a la Academia en algún momento. Pero también le tengo que decir que la Academia, como las industrias del Ibex 35, y como tantos otros lugares a los que nos cuesta llegar, no es más que un reflejo de nuestra sociedad. En el momento en que las mujeres tengan papeles predominantes en nuestra sociedad, le aseguro que habrá más mujeres en la RAE. Así como en el diccionario recogemos el reflejo de lo que sucede en la calle, la Academia es reflejo de lo que pasa en la sociedad. También le digo que la Academia catalana, por ejemplo, tiene muchas menos mujeres que la RAE así que algo estamos avanzando.

¿Puede ser que la literatura esté perdiendo ese peso que tuvo, por ejemplo, en su juventud?

La literatura tuvo su momento maravilloso en el siglo XIX cuando fue un elemento nacional. Cada nación tenía como referentes a sus clásicos y esos constituían un tesoro que se enseñaba en las escuelas. El referente nacional ya no es la literatura, ahora, es el fútbol y, por tanto, la literatura volverá, quizás, a lo que era en el siglo XVIII: el reducto de gentes a las que les interesaba el arte. En el siglo XIX la revolución de las ideas de los socialistas utópicos entraron a través de la literatura y en las fábricas se leían novelas más o menos revolucionarias, ahora, eso no ocurre, al contrario.  

La protagonista de Vengaré tu muerte (su nueva obra) es una mujer que quiere hacer justicia. Eso de hacer justicia no parece muy real ahora, ¿no? ¿No cree que estamos en un punto en el que la justicia se ha convertido en un circo mediático?

Lo que ocurre en este momento es muy grave. Antes se llamaba a alguien con un insulto en la barra de un café, ahora eso pasa en un espacio público como Twitter y la resonancia es mucho mayor, haciendo que ese insulto que, en realidad, es un contenido vacío adquiera un valor que es necesario detener. Vemos que aquellos que creían hacer justicia por llamar a alguien «hijo de puta» son los más injustos en la medida en que crean una bola mediática. Creo que todo el mundo es libre de expresar sus opiniones mientras no sean claramente ofensivas.

Ahora bien, si debatimos sobre la libertad de expresión en el campo artístico yo creo que debemos tener otros puntos de entendimiento. Le pondré un caso: Carlos Barral, el editor, escribió un libro en el que nombraba expresamente a una persona y la calificaba como “hiena”. Esa hiena puso una querella. Barral tuvo la fortuna de morirse antes de que llegara a juicio, pero es posible que la hiena hubiese perdido porque el territorio de la ficción plantea otras cuestiones. Aquello que se puede entender como ficción, como las canciones de un rapero que ahora está en juicio, por ejemplo, se puede amparar dentro de un criterio artístico.

El ajusticiamiento público, ese querer 'linchar' a alguien es muy usual ahora y, de hecho, es más fácil con las redes sociales.

Claro. Es el caso de una mujer dominicana que cometió, recientemente, un crimen en España. Yo pensé “pobre mujer” porque es mujer, es negra y es extranjera, es decir, tenía muchos componentes para ser una presa para aquellos que buscan atacar creyéndose justos. Lo peor de todo esto es ver que la gente queda terriblemente descansada si se puede culpar a alguien que representa a una minoría. Si hubiera sido alguien de aquí las cosas hubieran sido muy distintas.

Los medios de comunicación, y no sólo las redes sociales, tienen mucha culpa. Les parece que dar una noticia así es ofrecer una verdad cuando, en realidad, es un ajusticiamiento. Además, ocurrió que la incriminación de esta ciudadana tapó otras cosas como las grandes manifestaciones de los jubilados reclamando derechos negados por el gobierno. Alguien dice que un crimen siempre alegra a un telediario, para mí es una barbaridad que, lamentablemente, está imperando en los medios. 

¿Las mujeres somos menos corruptas o hemos estado menos en el poder?

Eso se dice pero yo no sé si estoy del todo de acuerdo. Nosotras llevamos la agenda doméstica, por ejemplo. En tiempos de mi madre, el dinero lo daba el padre a la madre para que ella comprara y mi pregunta es ¿se quedaban estas mujeres algo para ellas? yo estoy segura de que no.

Nosotras estamos más acostumbradas a la distribución del día a día y sabemos en qué tenemos que invertir, somos más capaces de organizar las posibilidades de nuestros dineros. Los taxistas se quejan, por ejemplo, de que las mujeres o no damos propina o damos menos. Es decir, tenemos más relación con lo que se puede gastar.

Usted es miembro de la RAE en la silla 'n' minúscula. ¿Cómo se tomó eso de que el español fuera recogido como 'marca España' sabiendo que es un idioma hablado mayoritariamente por otros países?

Me pareció un error. El español no es patrimonio de España y es estupendo que no lo sea. Por eso, la Asociación de Academias de la Lengua Española (ASALE) de los países latinoamericanos y la RAE tenemos unas relaciones de hermandad. Fue, sinceramente, una metedura de pata porque, como catalana, además, le tengo que decir que no sólo el castellano representa a España y, de nuevo, es estupendo que no lo sea.

 

Directora de El PortalVoz, en Madrid, España. Vivian Murcia G. @vivimur83