EL TEATRO Jorge Eliécer Gaitán convertirá su escenario en una pista de hielo real para presentar el espectáculo “El lago de los cisnes”, durante el miércoles y jueves, 22 y 23 de mayo; que gracias a una refinada técnica combina delicadamente el ballet clásico y el patinaje artístico.

Los capitalinos tendrán la oportunidad de disfrutar de esta obra en dos únicas funciones hoy y mañana, incluidas en la gira “Latin Américas 2024” que inició en Argentina y luego de visitar Chile y Perú llega a Colombia de la mano de la Compañía Dreams on Ice.

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“El lago de los cisnes” es la obra que pone en manifiesto la magnífica tradición del ballet clásico con exquisitas coreografías, que llevarán al público a un reino de hielo con elegancia y encanto. Son patinadores de nacionalidades diferentes que van dejando ver como la cultura y el arte más allá de cualquier otra connotación permiten reunir en un mismo escenario artistas de Rusia, Ucrania, Estados Unidos, Inglaterra, Polonia y Argentina, mostrando una interesante combinación de técnicas con estos países reunidos.

Lo que hace única a esta presentación es la incorporación de tecnología de punta que transformará por completo la experiencia teatral.

Ballet clásico

Para lograr este impresionante efecto, se verterán en el escenario del teatro cinco toneladas de hielo molido, gracias al arduo trabajo de un equipo de veinte personas durante poco más de dos días.

Las puntas de pies sobre delicadas zapatillas, pasarán a estar sobre afiladas cuchillas de acero, en una novedosa combinación de danza clásica y patinaje artístico cuya expresividad, elegancia y belleza agregan magia a uno de los clásicos cuentos de hadas, que nos dejará sin aliento con sus magníficos trajes.

Es uno de los ballets más icónicos y queridos de la historia de la danza, creado hace más de un siglo aún sigue cautivando a audiencias de todo el mundo. Es una muestra de enorme belleza y destreza que junto a la evocadora música de P.I. Tchaikovsky hace de este espectáculo una experiencia única.

Es la historia de amor entre el príncipe Sigfrido y Odette, una princesa convertida en cisne por el malvado mago Rothbart. Los personajes de Odette, el cisne blanco y Odile, el cisne negro, son interpretados por la misma bailarina. Una dualidad que simboliza la lucha entre el bien y el mal. Como en otras obras de danza, aquí se mezclan mundos reales y fantásticos, además de símbolos que apuntan a una profundidad psicológica que habla de búsquedas y transformaciones de la vida y la muerte.

Se estrenó en el Teatro Bolshoi de Moscú el 20 de febrero 1877. La coreografía que creó Reizinger, un coreógrafo checo que llevaba seis años trabajando para los Teatros Imperiales de Moscú, tuvo unas críticas terribles. Paradójicamente, no fue muy aceptado en su momento. Sin embargo, el 15 de enero de 1895, con la nueva coreografía de Marius Petipa y de Lev Ivanov esta obra logró un gran éxito en el Teatro Mariinsky de San Petersburgo.

Sinopsis

La obra transcurre entre el amor y la magia, enlazando en sus cuadros la eterna lucha del bien y del mal. La protagonizan el príncipe Sigfrido, enamorado de Odette, joven convertida en cisne por el hechizo del malvado Von Rothbart y Odile el cisne negro e hija del brujo.