La 26ª edición del festival Jornadas Cinematográficas de Cartago (JCC), en Túnez, que se promociona como un escaparate del cine comprometido africano y del mundo árabe, comenzó bajo estrictas medidas de seguridad, en tanto el país es blanco de los yihadistas extremistas.

"El cine y el desgarro del velo de las tinieblas son los garantes de la más grande victoria contra el terrorismo", lanzó Ibrahim Letaief, de 49 años, director de este festival, durante la ceremonia de inauguración.

Este festival quiere manifestar "el rechazo a esta dictadura oscurantista que se instala poco a poco", dijo a la AFP antes de la ceremonia.

Queremos "anclar estas jornadas de Cartago en su territorio arabo-africano, manteniendo la apertura hacia las filmografías de todo el mundo, (sobre todo) aquéllas que comparten nuestra necesidad de independencia y expresión cultural", añadió, agregando que esta 26ª edición "es un antídoto contra la violencia".