Visos del arte clásico y contemporáneo en los lienzos de Julián Burgos | El Nuevo Siglo
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Sábado, 14 de Diciembre de 2019

Piezas cargadas de humor que fusionan la tradición de la pintura occidental con la cultura popular contemporánea, así se define la muestra ‘Invisible’ del colombiano Julián Burgos quien exhibe 30 lienzos que representan la época actual con alusiones a periodos antiguos en el Museo de Arte Moderno de Bogotá.

En las obras de la exposición está impresa la influencia clásica que tiene Burgos, que considera que tanto la pintura clásica como la contemporánea ‘Son como los sueños, una compresión de la realidad y del inconsciente colectivo. El arriesgado y eléctrico trabajo del artista estará exhibido hasta el 15 de marzo del 2020 en el MAMBO.

“Mis obras son como un tornado que pasa por un pueblo. El tornado se lleva las casas, árboles, perros; todo lo que recogió del paisaje. Pero lo que está en el tornado no es el pueblo. En este sentido, podría decir que mi obra es abstracta más que figurativa”, comentó Burgos.

El proceso creativo del artista parte del Renacimiento, un periodo que genera una gran influencia en sus obras pues es la época en la que nace la sociedad de consumo, producto de las revoluciones industriales. En el siglo XV y XVI surge el humanismo renacentista y aparecen en la pintura nuevos símbolos que se convertirán en lo que hoy reconocemos como publicidad y el retrato como culto a la personalidad.

Por ejemplo, el desnudo de Tiziano o el retrato del Papa Inocencio X de Velázquez. El artista usa estos símbolos en su obra, y partiendo de un repertorio personal, extrae secciones de las piezas maestras de la historia del arte, las fragmenta y las reconstruye desde la contemporaneidad.

“Si yo quiero pintar un cielo, no salgo a buscarlo afuera, ni tampoco en fotografías, sino que lo busco en mi repertorio personal de imágenes y dibujos. Cuando viví en Europa copiaba cuadros de los maestros clásicos en los museos y empecé a enriquecer mi repertorio. Si quiero pintar un cielo, que tenga cierta humedad, ciertos colores de un atardecer o un contraste entre nubes, sé dónde lo voy a encontrar, lo busco, lo extraigo y lo uso en mis obras. Así mismo incorporo imágenes y símbolos de la pintura pop”, desglosa Burgos.

El artista presenta en Invisible, obras de diferentes efectos pictóricos y registros estilísticos; desde el realismo Trompe-l'œil2 hasta lo caricaturesco, y desde pulidos acabados hasta difusos. De esa manera, el artista logra plasmar la frivolidad del rococó del siglo XVIII.

Las fuentes de las que se nutren sus pinturas no son referenciadas de manera explícita en sus obras. El artista las recrea a través de diferentes perspectivas y puntos de vista. Frecuentemente, Burgos cambia dramáticamente la paleta de color de la composición original, agregando tonos ácidos o incluso reduciéndola a la radicalidad del blanco y negro.

El curador de la exposición y Curador Jefe del MAMBO, Eugenio Viola, explica: “el trabajo del artista es un ejemplo de meta pintura por la forma en la que el medio participa en las políticas de representación, en las técnicas y en las estrategias de significación de la pintura en sí misma.”

Invisible se relaciona con las prácticas emergentes de recolección y exposición de imágenes. El trabajo de Burgos traspasa los límites de la pintura como medio e investiga sus códigos y sus posibilidades. En algunas obras, el pintor incluye frases que son un elemento de composición y que hacen parte de un reciclaje de imágenes pop, de arte clásico y de fragmentos textuales pertenecientes a su repertorio.

“Son frases que he visto, las anoto y a veces tienen una relación con el cuadro, o de repente no tienen un sentido y crean un absurdo”, esclarece Burgos.

Por otro lado, más allá de la apariencia juguetona, la obra de Burgos emerge de referentes históricos, artísticos y filosóficos. También explora la relación entre imagen y representación, entre lo individual y lo colectivo.

Las obras de ‘Invisible’ crean un sentimiento, una sensación de movimiento “Busco una especie de torbellino en mi obra, eso es lo que me impulsa, y cuando alcanzo esa sensación en una de mis piezas, pienso que está terminada”, desarrolla Burgos.