Con el inicio de la tercera ‘grande’ del año, la Vuelta a España, renacen las esperanzas del ciclismo colombiano de ver a sus representantes ganando etapas y a uno en lo más alto del podio en el Paseo de la Castellana el 8 de septiembre.
En el Giro de Italia no se ganó ninguna fracción, pero Daniel Felipe Martínez se coronó subcampeón, detrás del intratable Tadej Pogacar.
En el Tour de Francia tampoco se obtuvieron logros parciales, a pesar de que los ‘escarabajos’ lo intentaron. Sin embargo, Santiago Buitrago evidenció sus grandes progresos y se clasificó décimo al final de la carrera en Milán.
En esta ocasión las condiciones son diferentes, porque en carrera no estará ninguno de los fuera de serie. A Pogacar, su equipo le dio descanso; Jonas Vingegaard compitió en la Vuelta a Polonia y Remco Evenepoel optó por los Juegos Olímpicos de París, en donde se colgó dos preseas.
Así las cosas, las fuerzas parecen estar más equilibradas con el estadounidense Sepp Kuss, campeón por sorpresa el año pasado, quien aspira a repetir éxito en una edición muy abierta y en la que el esloveno Primoz Roglic, tres veces ganador de esta ronda, intentará aprovechar sus oportunidades.
En un trazado con un perfil favorable a los escaladores, el equipo con mejores argumentos sobre el papel es el Visma-Lease a Bike de Kuss y Wout Van Aert, pero también se presenta fuerte el Team UAE Emirates, que liderarán el británico Adam Yates y el portugués Joao Almeida, que tendrán ahora la oportunidad de demostrar su talento en ausencia del fenómeno esloveno Tadej Pogacar.
Estarán respaldados por la gran esperanza mexicana Isaac del Toro (20 años), que sueña con hacerse un hueco entre los más grandes del pelotón.
No estará en esta Vuelta el español Juan Ayuso, que en el Tour de Francia dio positivo para covid.
Esperanza
En competencia estarán siete escarabajos, pero ninguno con el rótulo de capoescuadra y mucho menos de favorito.
Sin embargo, ello no quiere decir que Brandon Rivera (Ineos Grenadiers), Santiago Umba (Astana), Hárold Tejada (Astana), Daniel Felipe Martínez (Red Bull - Bora - Hansgrohe), Éiner Rubio (Movistar), Nairo Quintana (Movistar) o Rigoberto Urán (EF Education - Easy Post) no tengan posibilidades de darles a sus equipos victorias de etapas y, por qué no, de estar en lo más alto del podio o en alguno de los otros dos cajones.
Nairo, en otras épocas, sería gran favorito, pero hay circunstancias que lo relegan al papel de gregario, como son que viene de una fase de recuperación tras la caída que sufrió y no hay que olvidar la larga para que tuvo por el veto de la UCI, hasta que el Movistar llegó a su rescate.
Aun así, es de esperar que el boyacense busque ganar una etapa para demostrar que sigue vigente y que con más continuidad y ritmo de carrera, puede volver a ser gran protagonista en las tres ‘grandes’ del ciclismo mundial.
Asimismo, está Rigoberto Urán para quien, se supone, esta será su última Vuelta a España. Es de esperarse que el ‘Toro de Urrao’ saque a relucir su casta y toda la experiencia para buscar hacerse con un lugar en el podio.
Rigo no necesita desgastarse buscando triunfos parciales, sino correr medido para acomodarse y sacar provecho de las batallas que libren sus rivales.
También está Dani Martínez, quien no llega a la ronda ibérica como líder del Bora, pero es el ‘Plan B’ del equipo alemán, en caso de que Roglic flaquee.
El cundinamarqués ya demostró que tiene argumentos para ser capo y, como se dice en el argot popular, es el ‘gallo tapado’ de la escuadra alemana.
El trazado de la carrera lo favorece y si está en el nivel que tuvo en el Giro, no sería extraño verlo vestido de rojo en el Paseo de la Castellana el 8 de septiembre o, por lo menos, siendo podio.
También está Éiner Rubio, quien ha venido progresando y es una de las cartas a jugar por parte del Movistar.
Los otros tres ‘escarabajos’ van a trabajar para los capos de sus equipos, pero ello no quiere decir que no puedan pelear alguna victoria de etapa y Colombia lo necesita para no pasar el año en blanco en las tres ‘grandes’ del ciclismo mundial.
No se trata de desconocer lo hecho en el Giro por Martínez o Buitrago en el Tour, solo que las victorias parciales también cuentan a la hora de hacer un balance general.
El arranque
La 79ª edición de la Vuelta parte desde Lisboa, Portugal. La meta final será en Madrid el 8 de septiembre, después de 21 etapas y una distancia total de 3.265 kilómetros.
El tramo portugués ocupará las primeras tres etapas, antes de que la ronda entre en territorio español por la región de Extremadura, desde donde pondrá rumbo hacia el sur, a Andalucía.
El tramo inicial, este sábado, es una contrarreloj de 12 km entre Lisboa y Oeiras con el río Tajo como testigo permanente.
El lunes 26 de agosto tendrá lugar el primer día de descanso y allí habrá un cambio de aires radical, pasando de Granada a Galicia, de punta a punta del país.
Las rutas gallegas, asturianas –incluida la emblemática subida a los Lagos de Covadonga–, cántabras, vascas, riojanas y castellanas serán así protagonistas en la segunda mitad, antes de esa última etapa de Madrid, que será una contrarreloj individual de 24,6 kilómetros.
Después de una edición en 2023 que incluía en su recorrido los finales en el Tourmalet y el Angliru, la organización de la Vuelta diseñó un recorrido de nuevo marcado por la montaña, con puertos emblemáticos como Lagos de Covadonga y Picón Blanco la víspera de llegar a Madrid y nueve metas en alto que serán claves.
La Vuelta 2024 apuesta por una contrarreloj final casi totalmente llana por las calles de Madrid, larga, de 24,6 km. La carrera podría no estar decidida, por lo que el reloj podría dictar sentencia con un final de infarto.
La montaña favorece a los colombianos, especialmente a Rubio y Martínez, y no hay que olvidar que Nairo en las carreras de tres semanas siempre remata bien y que, sin importar lo que ocurra, siempre da guerra. No es pedalista que se conforma con poco, sino que siempre quiere dar más.