Sobre las relaciones bilaterales y el apoyo de ese país al proceso de paz hablaron telefónicamente ayer el presidente Juan Manuel Santos y el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, en la víspera de una conversación prevista con su homólogo Donald Trump.
Durante la charla telefónica con Pence, "se reafirmó el interés de ese país por mantener las relaciones especiales con Colombia y continuar el apoyo al proceso de paz y a su implementación", dijo la Casa de Nariño a través un comunicado.
"Los dos líderes hablaron también de la necesidad de continuar la colaboración en la lucha contra el narcotráfico y la ayuda a los países centroamericanos", añadió el texto.
Más temprano, Santos trinó que seguirá "fortaleciendo relaciones bilaterales y estratégicas" con Estados Unidos, para lo que este viernes hablaría con Pence y el sábado con el propio Trump, quien asumió la presidencia el pasado 20 de enero.
Estados Unidos, que ha tenido desde hace décadas en Colombia a un aliado estratégico en la región, se comprometió a entregar 450 millones de dólares para implementar el plan Paz Colombia del expresidente Barack Obama, en apoyo a la aplicación del acuerdo de paz firmado en noviembre por el gobierno de Santos y las Farc.
Esta estrategia prosigue al llamado Plan Colombia, en el marco del cual Washington financió durante muchos años con miles de millones de dólares el combate contra las guerrillas y el narcotráfico.
Continuidad
Sin embargo, la continuidad de dicha ayuda se creyó comprometida a raíz de la divulgación de las respuestas dadas en enero por el secretario de Estado, Rex Tillerson, a las preguntas planteadas por los miembros de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado como parte de su proceso de confirmación.
Tillerson sostuvo entonces que Washington revisaría el reciente acuerdo de paz en Colombia para determinar qué tanto apoyo debe de seguir brindando Estados Unidos al pacto respaldado con entusiasmo por el gobierno de Barack Obama.
Sin embargo, al posesionarse como jefe de la diplomacia norteamericana Tillerson, un vocero del Departamento de Estado salió nuevamente a ofrecer su respaldo al proceso de paz de Colombia y aplaudió los avances en el proceso de desmovilización.
"Estados Unidos ha apoyado a Colombia en tiempos de conflicto y continuará siendo un socio fuerte durante la paz. Damos la bienvenida a los esfuerzos del presidente Santos y al pueblo colombiano por buscar la paz justa y duradera que Colombia merece y nos motiva los avances recientes en el proceso de desmovilización", dijo el vocero.
La declaración concuerda con lo expresado por Tillerson al Senado, cuando escribió que “estoy de acuerdo en que el Plan Colombia ha provocado una dramática diferencia y puede ser considerado como una éxito en política exterior para ambos países. Colombia es, creo yo, uno de nuestros aliados más cercanos en el hemisferio y un socio comercial importante. Si soy confirmado haré todo el esfuerzo posible para continuar la estrecha cooperación”.
Hay que mostrar avances: Biden
En diciembre, el saliente vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden, llamó a Colombia a demostrar que "tiene todo organizado" con relación al proceso de paz para garantizarse el apoyo del gobierno de Trump.
"Entre ahora y enero, mientras más pueda demostrar este país que tiene todo organizado (...) más probable es que las políticas que ya son sólidas se mantengan", dijo entonces Biden.
El ahora ex vicepresidente estadounidense habló en Cartagena al participar en la instalación de un consejo asesor empresarial entre ambos países junto al presidente Santos, con quien sostuvo la víspera una reunión privada en la que lo felicitó por su "notable" trabajo por la pacificación del país.
"Este es un momento de oportunidades inigualables para Colombia", dijo Biden, aunque advirtió que "ahora empieza la parte difícil" porque "la firma de un acuerdo por sí sola" no garantiza la paz.
Durante el encuentro, Biden recalcó el apoyo de Estados Unidos a la implementación del pacto con las Farc y subrayó el compromiso de su país de destinar el año próximo 391 millones de dólares para implementar el plan Paz Colombia.
Narcotráfico
Sin embargo, más allá de cualquier reserva al proceso de paz en sí, lo que realmente puede interesar a la Casa Blanca es el impacto de los acuerdos del Teatro Colón en la lucha antidroga.
La última medición de Naciones Unidas, al finalizar el 2016, determinó que en Colombia había cerca de 96.000 hectáreas de cultivos ilícitos. Pero fuentes confiables creen que en el 2017 podría incrementarse esa área cultivada.
Cabe recordar que el Departamento de Estado debe pasar un informe sobre esta materia al Congreso para que los legisladores norteamericanos puedan dar visto bueno a los desembolsos de 2018 que deben quedar autorizados este año.
Sobre esto, Tillerson lo que le dijo a su Congreso fue que Estados Unidos “continuará la cooperación bajo el entendido de que Colombia seguirá cumpliendo sus compromisos en lucha contra las drogas”, anotando que “me gustaría revisar los detalles del reciente acuerdo de paz y determinar hasta qué punto deberá Estados Unidos respaldarlo”.