Los congresistas y sus asesores de las comisiones económicas del Legislativo comenzaron la revisión del Presupuesto General de la Nación que fue presentado el pasado 29 de julio por el ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo. Se espera que a lo largo de esta semana y la siguiente se den a conocer los ponentes. Así lo afirmó a EL NUEVO SIGLO Ciro Ramírez, senador del Centro Democrático, integrante de la Comisión Tercera de Senado.
De otro lado, el senador del Centro Democrático Miguel Uribe sostuvo que apenas están en revisión del documento, mientras Mauricio Gómez Amín afirmó que aún no ha recibido el documento de manera oficial, pero que apenas lo tenga empezará su análisis correspondiente.
"Déficit fiscal crítico"
Entre tanto, en la comisión de empalme, Daniel Rojas, quien hace parte del equipo del presidente electo Gustavo Petro, dijo que “la realidad fiscal del país es una gran preocupación. El nivel de endeudamiento y de déficit fiscal que encontramos para el próximo cuatrienio es crítico; por lo tanto, la reforma tributaria que cursará en el Congreso de la República con carácter prioritario se nos convierte en una reforma imprescindible para llevar a cabo la propuesta de Gobierno”.
Además, dijo que “el presupuesto asignado para la inclusión social no contiene las partidas que se requerirían para financiar los subsidios de Ingreso Solidario. Adicionalmente, nos encontramos con un déficit del Fondo de Estabilización de Precios de Combustibles de alrededor de $30 billones. Por lo cual nos queda el reto de conseguir los recursos para seguir subsidiando el precio de la gasolina”.
Por otra parte, según el ministro Restrepo, este proyecto de ley propone avanzar en un ajuste ordenado y gradual de las finanzas públicas. “El PGN 2023 está programado acorde con las posibilidades reales de financiación del país, en un entorno global de incertidumbre y presiones inflacionarias que tiende a elevar el costo de los intereses de la deuda pública y amenaza con restarle dinamismo al crecimiento económico; al tiempo que subraya la pertinencia de mantener la inversión estatal requerida para, de forma responsable, superar las secuelas sociales y económicas dejadas por la pandemia”.
Por su parte, Mauricio Lizcano, coordinador de la comisión de empalme, afirmó que “esto no se trata de un espejo retrovisor, sino de que los colombianos entiendan el estado de cómo recibimos el país, pero también que el Presidente tenga las herramientas y la información necesaria para tomar decisiones desde el día uno de su mandato”.
Sin duda esta reforma tributaria será una prioridad para los congresistas, que deberán evaluar con lupa el documento presentado y además reunirse con el ministro designado, José Antonio Ocampo, para revisar los puntos álgidos así como los recursos del presupuesto para el próximo año.
Cabe recordar que el monto total es de $391,4 billones e incorpora las necesidades de gasto conocidas a la fecha de su presentación. De esta cifra, $250,6 billones (64%) corresponde a gastos de funcionamiento, $78 billones (19,9%) al pago del servicio de la deuda y $62,8 billones (16%) a inversión. Como porcentaje del PIB, el presupuesto equivale al 27%.
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A nivel sectorial, 89,4% de los recursos del presupuesto de inversión se concentra en los sectores de inclusión social y reconciliación (25,36%); transporte (15,39%); hacienda (10,94%); educación (8,31%); trabajo (7,36%); minas y energía (6,86%); vivienda, ciudad y territorio (3,71%); defensa y policía (3,21%); planeación (2,34%); agricultura y desarrollo rural (2,10%); tecnologías de la información y las comunicaciones (2,02%) y salud y protección social (1,83%).
Entre tanto, el jefe de la cartera de Hacienda afirmó que este presupuesto garantizará que el país alcance nuevamente un superávit fiscal primario de 0,1% del PIB en 2023, un resultado no observado desde 2019, año en el que este gobierno comenzó un proceso de ajuste de las finanzas públicas, alcanzando el primer superávit fiscal en siete años. Adicionalmente, con esto se lograría reducir las necesidades de financiamiento de deuda pública a 6,7% del PIB en 2023, cuando normalmente son del 8,2%.
Por ahora resta esperar que durante los próximos días se definan los ponentes en el Congreso y que así se dé inicio al debate de aprobación del documento radicado. El gobierno entrante deberá evaluar el presupuesto presentado y tomar las decisiones fiscales necesarias en cabeza del ministro designado y a la espera de qué se aprueba en las comisiones económicas.
Puntos clave del PGN
-Gasto de funcionamiento: $250,6 billones (64%)
El gasto de funcionamiento asciende a $250,6 billones, que equivalen a un incremento del 18,7%. Cerca del 76,1% corresponde a transferencias. La distribución será en: gastos de personal, $44,2 billones; adquisición de bienes y servicios, $11,6 billones; transferencias, $190,7 billones; gastos de comercialización y producción, $2 billones, adquisición de activos financieros, $656 mm, disminución de pasivos, $418 mm y gastos por tributos, multas, sanciones e intereses de mora, $1,1 billones.
-Se estima que las transferencias en el PGN de 2023 crecerán 22,8%, al pasar de $155,2 billones en 2022 a $190,7 billones en 2023. Las más importantes son las siguientes: las que hacen parte del Sistema General de Participaciones ($54,9 billones), y se destinan a atender gastos en educación, salud, agua potable y saneamiento básico; las transferencias para pensiones y asignaciones de retiro; transferencias a las Instituciones de Educación Superior Públicas y las destinadas a atender el pago de las pensiones, salud y cesantías de los docentes del Magisterio Público afiliados al Fomag. Finalmente, las transferencias para aseguramiento en salud también se programan en cumplimiento de mandatos legales.
-Pago servicio de deuda: $78 billones (19,9%)
El servicio de la deuda pública crece en 8,8%, al pasar de $71,7 billones a $78 billones, de los cuales $31,9 billones se destinan a principal, y los restantes $46,1 billones, a pago de intereses y otros costos asociados.
-Inversión: $62,8 billones (16%)
La inversión pública pasa de $69,6 billones en 2022 a $62,8 billones en 2023. El presupuesto de inversión para 2023 será equivalente a 4,3% del PIB, lo que muestra el esfuerzo realizado por el gobierno para estimular el crecimiento y la generación de empleo.