Primero fue la supuesta alianza entre Avianca y Viva; posteriormente surgió la propuesta de JetSmart por el 100 % de Viva y dijo que quería participar en el mercado aéreo con Viva; y el sábado pasado, Latam y Wingo señalaron que ellos también tienen velas en este entierro. En el medio está la Aerocivil, que se ha caracterizado por su mutismo. ¿Quién tiene la razón en este descontrol del mercado aéreo?
Lo único cierto de esta situación es que los pasajeros son los principales damnificados de este hecho con el cambio de horarios de vuelos, suspensión de frecuencias y un caos generalizado.
Lo único claro es que Viva, la aerolínea de Bajo Costo, anunció el inicio de su Proceso de Recuperación Empresarial (PRE) de conformidad con las normas que protegen a compañías afectadas por la crisis del covid-19, con miras a lograr su permanencia en el mercado, a la espera de la urgente definición por parte de la Aerocivil sobre su alianza con Avianca.
De acuerdo con esa compañía, “esta determinación se da debido a la crisis que enfrenta al sumar a los efectos del covid-19, los factores macroeconómicos actuales que son de público conocimiento. Adicionalmente, la compañía no ha podido tener acceso a capital durante los últimos nueve meses, dado que aún no ha sido posible implementar su integración con otra aerolínea, que sigue pendiente de autorización por parte del Gobierno Nacional”.
Recuperación
Señala la aerolínea que “Viva se acoge a este proceso voluntario de recuperación que tiene una duración de 90 días, con el fin de reestructurar sus deudas a través de una negociación con sus acreedores principales para seguir operando bajo condiciones sostenibles que garanticen la continuidad de la empresa. Esta decisión se da tras seis meses de espera de la definición de la alianza con Avianca, que de ser aprobada nos permitiría continuar en el negocio de bajo costo mediante nuestra vinculación a otro grupo de aerolíneas con peso en la región, con lo cual queremos asegurar la preservación de los empleos y reforzar nuestro compromiso por generar mayores niveles de conectividad en el país a bajo costo sobre la base de obtener la inyección de capital requerida”.
Manifiesta Viva que “después de estudiar todas las alternativas disponibles frente a la situación actual, entramos a este proceso voluntario de mediación mientras esperamos la urgente decisión por parte de la autoridad de nuestra alianza con Avianca. Así como nos hemos adaptado en el pasado, estamos convencidos de que podremos superar esta situación por el bien de todos los pasajeros que se han visto beneficiados del modelo de Bajo Costo en el que somos expertos”.
Añade Viva en su información que “durante esta reestructuración, en Viva continuaremos velando por la continuidad de las operaciones y la prestación de nuestros servicios. Finalmente, cualquier novedad frente a este proceso, las operaciones de la compañía o las definiciones por parte de la autoridad sobre la alianza con Avianca, se comunicarán oportunamente”.
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La oferta de JetSmart
JetSmart expresó su deseo de adquirir 100 % de las acciones de Viva el pasado 7 de febrero. La aerolínea chilena de ultra bajo costo, con servicios en el mercado suramericano desde 2017, informó su intención de entablar negociaciones para adquirir el 100 % de las acciones de la aerolínea colombiana Viva Air.
La compañía confirmó tener los recursos, capacidad y experiencia para negociar y cerrar una adquisición de manera ágil.
“Creemos que una transacción entre JetSmart y Viva Air permitirá mantener el modelo ultra-bajo-costo en Colombia y eso permitirá seguir ofreciendo más rutas a menores precios. Tenemos una visión de largo plazo para expandirnos en Suramérica y estamos en posición de continuar invirtiendo en nuestro crecimiento. Creemos en el potencial del mercado colombiano. Nuestra alternativa redundará en beneficio de los usuarios, fortaleciendo la libre competencia en el sector y promoverá el turismo y la conectividad en el país”, dijo al respecto Estuardo Ortiz, CEO de JetSmart.
Esta aerolínea asegura que esta opción tiene las mejores condiciones para el mercado, ya que las aerolíneas no tienen rutas en común en Colombia y ambas operan flotas nuevas de Airbus A320neo.
“En JetSmart tenemos la experiencia, capacidades y recursos para llevar a cabo esta transacción y esperamos poder avanzar en ella de forma rápida y efectiva”, agregó el CEO.
La aerolínea ha transportado más de 16 millones de pasajeros y cuenta con una orden en firme de aviones Airbus A320 y A321 que le llevará a superar los 124 aviones en 2029.
Ortiz aseguró que, de darse la negociación, no habría monopolio, ya que no comparten rutas en domésticas, sino 3 % a nivel internacional con la ruta Lima-Cuzco.
Protesta de Latam
La aerolínea Latam se pronunció por primera vez sobre el caso. El apoderado legal de la compañía envió una carta a Edgar Benjamín Rivera, director de Transporte Aéreo y Asuntos Aerocomerciales de la Unidad Administrativa Especial de la Aeronáutica Civil, con copia a la Superintendencia de Industria y Comercio, donde le solicita que se devuelva 100 % de los slots de Viva al Aeropuerto El Dorado en caso de autorizarse dicha transacción.
“Cualquier valoración debe ser contrastada con el fin de que estos sean asignados y distribuidos por la Aerocivil a empresas operadoras de transporte aéreo distintas de Avianca”. Además, agrega la carta que su distribución debe ser bajo condiciones no discriminatorias y de transparencia.
La carta sienta su voz de protesta en torno a la radicación del proceso de integración entre ambas aerolíneas, debido a que se hizo de forma confidencial, lo que impidió que empresas como Latam pudieran pronunciarse adecuadamente y mitigar los impactos negativos de esta operación.
Wingo reclama mercado
De otra parte, la semana pasada la aerolínea Wingo, perteneciente a Copa Holdings, S.A., y que vuela a 18 destinos de Latinoamérica con tarifas bajas, dijo que se encuentra a la espera de la decisión final que deberá tomar la Aeronáutica Civil respecto al proceso de integración que estaban adelantando Avianca y Viva.
La empresa, además, asegura que "seguimos enfrentando a la posible conformación de un actor que concentraría más del 60 % del mercado aéreo colombiano y controlaría la infraestructura esencial para la prestación del servicio".
Para Wingo esto iría en contravía de los sanos índices de competencia y afectaría el interés general y el bienestar colectivo.
"Una eventual integración de estas dos compañías aéreas representaría la configuración de un actor con hasta el 65% de los 'slots' en las franjas horarias de mayor demanda en la operación del Aeropuerto El Dorado de Bogotá. A todas luces reflejaría una posición dominante que evitaría la democratización de la infraestructura para prestar un servicio público esencial", asegura Wingo.
Desde la empresa confían en la decisión de la autoridad aeronáutica dentro de los plazos establecidos para no activar el Silencio Administrativo Positivo.
En un comunicado destacan otros mercados cercanos como el de México y Estados Unidos, donde no hay ningún actor que sobrepase más del 40 % del mercado de pasajeros.
La compañía asegura que en caso de que se avance con la integración debe haber condicionamientos estructurales para las aerolíneas. "Esto incluye la devolución de un número significativo de 'slots' en franjas horarias de alta demanda en el Aeropuerto Internacional El Dorado de Bogotá; así como 'slots' y posiciones de parqueo en otros aeropuertos congestionados como el José María Córdova de Medellín y el Rafael Núñez de Cartagena", explica la empresa.
Modelo de bajo costo
Para Wingo no es correcta la concentración en el mercado en ninguna industria "bajo el argumento de salvar a una compañía en crisis". Aseguran que todas las aerolíneas se han enfrentado a ambientes de alta inflación, devaluación de las monedas y el incremento del precio de los combustibles.
"La aerolínea es enfática en expresar que el modelo de bajo costo en Colombia está más vivo que nunca y que su continuidad no depende de la existencia de un único operador. Todo lo contrario, su verdadera garantía de supervivencia requiere condiciones adecuadas para que todos los operadores de bajo costo podamos avanzar en nuestro plan de crecimiento", aseguran.
Para Wingo la forma de garantizar el acceso a tarifas más bajas es mediante una oferta aérea más diversa y competitiva. Asimismo, pide una distribución más equitativa de 'slots'.