Empujado por el conflicto comercial entre China y Estados Unidos y el cambio de posiciones de los inversionistas, la cotización del dólar logró ayer trepar a su mayor valor en la historia del país.

En una jornada donde los mercados tanto en Colombia como en el resto del mundo reaccionaron con incertidumbre ante “la guerra”, el dólar arrancó con una fuerte alza de $3.474, es decir casi $100 por encima de la Tasa Representativa del Mercado (TRM) del viernes pasado de $3.365.

Este comportamiento provocó un récord que no se veía desde el 12 de febrero de 2016, cuando la divisa llegó a $3.434,89.

Estas reacciones en cadena del dólar provocaron asimismo que otros mercados como el del petróleo y el de las bolsas de acciones cayeran.

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Sin embargo, el detonador principal fue la decisión de China de devaluar el Yuan en casi 7%, lo que provocó el revulsivo financiero en todo el mundo.

Reacciones

El codirector del Banco de la República, José Antonio Ocampo, dijo que las otras monedas latinoamericanas deben responder en la misma dirección que el peso nacional.

Ocampo indicó que el peso colombiano “tiende a ser afectado por las monedas latinoamericanas y por el petróleo, que se desplomó tras los nuevos anuncios de la ‘guerra comercial’ entre Estados Unidos y China. Así que el alza del dólar responde a esta coyuntura internacional muy negativa de poner aranceles adicionales a China y la respuesta de dichas autoridades a esta situación”. 

Manifestó que el alza del dólar debería tener un efecto positivo sobre la balanza comercial, “es más rentable exportar y más caro importar. En inflación, desde el año pasado no hemos observado un impacto muy fuerte de la depreciación del tipo de cambio sobre la inflación. En general, el efecto es marginal”.

Frente a la opción de intervención del dólar que está en la Resolución 8 que regula el mercado cambiario, señaló que se podría discutir en la Junta del Banco de la República, pero que hasta ahora no se ha hablado del tema.

Por su parte Felipe Campos, gerente de Estrategia e Investigaciones Económicas de Alianza Valores, dijo que es muy probable de que el dólar en el mercado local llegue a los $3.500 e incluso que lo supere y alcance precios de hasta $3.700, como una alternativa “para no dejar ir al yuan”.

Respecto a esta situación, Diego Franco, presidente de Franco Group y corredor de bolsa en la BVC, dijo que existen “todas” las posibilidades de que el dólar alcance los $3.500 y podría ser pronto.

Según Franco todo depende de lo que pase con el yuan, que fue lo que finalmente le puso el tinte a las negociaciones de esta jornada y si finalmente las amenazas de Donald Trump toman otra escala diferente, es decir que seguimos a la espera de lo que pasa con China y Estados Unidos.

Los intereses

Para los analistas esta situación de venía venir luego de la rebaja de intereses por parte de la  Reserva Federal la semana pasada, hecho que ha provocado que los inversores busquen refugio en dólar. 

Según Franco, aunque la guerra comercial puede extenderse, no significa que el dólar pueda aumentar tanto, ya que en su dinámica, los mercados se acostumbran a operar con ruido. 

“La presión del yuan fue lo que sobresaltó las monedas. Eso quiere decir que si en las próximas sesiones no hay ningún comentario de China y Estados Unidos, el mercado va acostumbrarse y ese dólar de $3.500 baje en las siguientes jornadas”.

Frente a la posibilidad de que esta coyuntura cambie el promedio de la meta del mercado de un cierre anual del dólar en $3.200, es poco probable, ya que esta situación es más una reacción que un cambio estructural y permanente en las negociaciones.

En los últimos días, China ordenó a las empresas estatales suspender la compra de productos agrícolas provenientes de EE.UU. Estas medidas son parte de la respuesta del país asiático a los nuevos aranceles anunciados por Trump.

Analistas de Corficolombiana consideran que si continúa la disputa comercial entre las grandes potencias, el dólar continuará subiendo en todo el mundo.

Esto, paradójicamente, va en contravía a la expectativa del Presidente estadounidense, que esperaba debilitar la moneda para aumentar las exportaciones de su país.

Las decisiones

De acuerdo con los analistas del banco Itaú, “el Banco Popular de China (PBOC) rebajó punto y medio la banda comercial de su moneda al nivel más bajo desde diciembre de 2018. Además, Pekín ha ordenado a las compañías chinas dejen de comprar productos agrícolas a Estados Unidos, como respuesta al aumento de aranceles a productos chinos, por parte de Donald Trump”.

Así mismo un portavoz del Banco Popular de China aseguró que la depreciación del yuan viene dada por el proteccionismo asumido unilateralmente y las estrategias en contra de China.

“Cabe destacar que el pasado jueves, Trump aseguró que impondrá aranceles del 10 % a productos chinos valorados en 300.000 millones de dólares a partir del 1 de septiembre, a lo que el Ministerio de Comercio chino respondió anunciando ‘represalias’, sin especificar en qué consistirían. Por su parte, el presidente Donald Trump, hizo un llamado a la Reserva Federal sobre la estrategia del gigante asiático sobre su moneda y las repercusiones para las dos economías. En Itaú esperamos que el yuan alcance los 7,10 dólares si se materializa por completo un escenario de guerra comercial”, sostienen los expertos.