LA ECONOMÍA de Estados Unidos sigue “en muy buena forma”, pero la Reserva Federal (FED) reaccionará en caso de una desaceleración peor a la esperada o de una baja inflación persistente, dijo un alto funcionario del organismo.
En un momento en el que varios analistas están comenzando a anticipar la posibilidad de una reducción en las tasas de interés este año o a principios de 2020, Richard Clarida, vicepresidente de la Reserva Federal, se mostró optimista.
No obstante, destacó que la FED está dispuesta a cambiar su curso si fuera necesario: “Estamos en sintonía con los riesgos potenciales”, aclaró.
“Si los indicadores económicos mostraran un déficit de inflación persistente, inferior a nuestro objetivo del 2%, o si mostraran que la evolución de la situación económica y financiera en el mundo presenta un riesgo de degradación significativa de nuestras proyecciones, el Comité (monetario) los tomaría en cuenta en la evaluación de la orientación de la política monetaria”, dijo Clarida.
El Vicepresidente de la FED así mismo estimó que por el momento las tasas se encuentran en un nivel adecuado (entre 2,25% y 2,50%).
También recordó que el Comité Monetario considera que la baja inflación es “temporal” y que debería “volver al 2% para 2020”, nivel que la FED considera ideal para la economía.
“Creo que la estabilidad de precios requiere no solo que la inflación actual se centre en nuestra meta del 2%, sino que la inflación futura sea igual” a ese nivel, continuó Clarida en una intervención ante el Club Económico de Nueva York.
Según el funcionario, los indicadores sugieren por ahora que las expectativas de inflación de largo plazo están en la base del rango de lo “coherente” con la estabilidad de precios.
La última reunión monetaria de la FED tuvo lugar entre el 30 de abril y el 1 de mayo. El Banco Central Estadounidense resolvió dejar sin cambios sus tasas de interés, y reiteró su actitud “paciente”, teniendo en cuenta el crecimiento “sólido” de la economía y la inflación “en declive”.
Pero esta reunión se realizó justo antes de una nueva escalada en la guerra comercial entre Estados Unidos y China, que representa una amenaza de desaceleración en el crecimiento mundial.
El Índice de Precios al Consumidor de abril se publicará hoy, según lo previsto. En marzo, había sido del 1,5% anual, frente al 1,3% de febrero.
Reservas de petróleo
De oro lado, los stocks de crudo estadounidense cayeron por debajo de lo esperado en Estados Unidos la semana pasada, mientras la producción volvió a alcanzar un nivel récord, según cifras publicadas ayer por la Agencia estadounidense de Energía (EIA).
Durante la semana terminada el 24 de mayo, las reservas comerciales de crudo se redujeron en 300.000 barriles, a 476,5 millones, aunque los analistas encuestados por Bloomberg pronosticaban una caída más pronunciada, de hasta 1,36 millones de barriles.
En tanto, los inventarios de gasolina aumentaron 2,2 millones de barriles, contra una caída esperada de 800.000 barriles.
Además, las reservas de otros productos destilados (combustible para calefacción y diésel) cayeron 1,6 millones de barriles, pese a la previsión de un aumento de 772.000 barriles./AFP