A no caer en depresión económica insta ProBogotá | El Nuevo Siglo
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Jueves, 2 de Abril de 2020
Redacción Política

El director de ProBogotá Juan Carlos Pinzón dijo que si se cumplen las medidas necesarias, en el mes de mayo podríamos estar operando bien

 

EL NUEVO SIGLO: ¿Cómo surgió esta iniciativa de las donaciones por parte de los empresarios por la crisis de la pandemia?

JUAN CARLOS PINZÓN: Ese fue un esfuerzo de todo el sector privado integrado por todos los empresarios que están afiliadas a ProBogota, la ANDI, Asobancaria, la Cámara de Comercio, Camacol y al Foro de presidentes de empresa, y obviamente todos tenemos ese deseo de colaborar, de sumarse, de ser solidarios, que salvemos vidas de todas las personas que sea posible y que creemos en las capacidades médicas para tal fin.

Para eso qué se hizo: tuvimos una reunión con un gran equipo de expertos en materia médica como el exministro de salud, el doctor Juan Pablo Uribe; el exsecretario de salud de Bogotá durante la alcaldía de Antanas Mockus, el doctor José Fernando Cardona, y en ese proceso, con los directores de varios hospitales, se concluyó que los temas más críticos en este momento y para los días que se vienen, son elevar las capacidades en tres temas.

 

ENS: ¿Cuáles son?

JCP: El primero de ellos es el de elevar las capacidades en material e insumos médicos que protejan al personal hospitalario (médicos, enfermeras y personal administrativo, porque ellos son los que están afrontando el reto y por eso necesitan ropa especial geles, alcoholes y todo tipo de insumos). En una segunda media está el tema de adquisición de pruebas, tantas como sean necesarias. Y tres, elevar el número de camas de cuidados intensivos, porque en unas semanas, desafortunadamente, se van a necesitar muchas más y ahí es en donde va a ser necesario tener todas estas necesidades satisfechas.

 

ENS: Ustedes planean conseguir $350.000 millones. ¿Ese es un rubro que, de acuerdo con sus estimaciones, alcanza para suplir las necesidades que me acaba de indicar?

JCP: Creo que es importante notar algo que está ocurriendo: el impacto económico que están sufriendo las empresas es enorme. Las empresas no están recibiendo ingresos, muchas de ellas están paradas y muchas otras, a pesar de eso, no solo están manteniendo el salario de sus trabajadores, sino que también están haciendo donaciones importantes.

 

La capacidad de donar se está haciendo cada vez más difícil y cada vez que un empresario está dando una donación, es un verdadero sacrificio, un verdadero esfuerzo porque lo que quieren es ayudar e incluso asumir costos y riesgos altos. Es un monto elevado pero hemos conseguido ya un dinero importante y vamos a seguir consiguiendo otras donaciones en estos días. La idea es llegar lo más lejos que podamos, para poder fortalecer estos hospitales en todos estos temas.

 

El aguante de la ciudad

ENS: ¿Cuánto cree usted que aguante Bogotá en esta coyuntura, con un confinamiento como el que estamos viviendo en estos momentos?

JCP: La cuarentena es una herramienta que ha probado tener un efecto positivo en la reducción de contagios pero en paralelo, es muy importante planificar cómo asegurarnos que vamos a poder abrir la economía. Porque la gente también necesita dinero. Dinero para comer, dinero para vivir, dinero para sus gastos de salud y dinero para pagar sus cuentas. Entonces, la única manera de lograr que las personas suplan sus necesidades, es que la economía esté activa.

 

Entonces, habrá que planificar cómo hacer para que la cuarentena nos beneficie y dure el menor tiempo posible (el que sea necesario) y luego, poder tener una economía que garantice que se haga desinfección en las oficinas, en los centros comerciales, en los centros de transporte y en las fábricas, para que haya zonas seguras.

Y para que haya millones de pruebas y así se reduzca el riesgo de contagio al mínimo, como ha sido el caso de Corea y de Taiwán, que han sido muy efectivos en su reactivación económica. Y en tercer lugar, que tengamos una economía con unas reglas de distanciamiento social razonables, pero que permitan que funcione la economía, que la gente genere ingresos, que la gente tenga empleo y lo pongo de la siguiente manera: que no nos vaya a matar el virus y que luego nos termine matando una depresión económica sin precedentes. No podemos dejar que eso ocurra.

 

ENS: Esta será una nueva economía pero, ¿cómo se puede lograr?

JCP: Tenemos que asegurarnos que todas las cadenas logísticas prioritarias funcionen a la perfección y ofrecer ayudas, pero paralelamente, tenemos que hacer un análisis de qué plan de choque va a necesitar la economía en adelante para poder reactivarla, sustituir importaciones, fortalecer la industria y motivar la generación de empleo a través de la construcción y la infraestructura, que son los grandes temas que van hacer que este país salga adelante.

 

ENS: ¿Cuánto cree que dure el coletazo de este mes o de lo que dure esta crisis?

JCP: Mire, especular sobre eso hoy en día es como hablar de con qué número nos podemos ganar la lotería. Eso es muy difícil de decir. Pero hay cosas que sí se pueden planificar algunas de estas, cómo operar una nueva situación y eso sí lo vamos a poder planificar. Sabemos que se necesitan pruebas, sabemos que se necesita desinfección, sabemos que vamos a necesitar cierto distanciamiento social y ciertos equipos para garantizar las normas sanitarias necesarias, etc. Ya vendrá una vacuna que irá creando cierta normalidad.

Ahora, yo estimaría que si el Gobierno nacional logra planificar estas cosas bien, adquiere los equipos y adquiere pruebas, yo creo que en el mes de mayo deberíamos estar pudiendo comenzar operar bien, aprender en el camino, ir mejorando, tomar decisiones hasta que esto ya no sea una carga sino un modo de vida.

 

ENS: Usted fue muy crítico frente a lo que hizo el Eln con la planeación de la fuga masiva en las cárceles de Colombia. ¿Qué opina frente a la posible salida de presos para mitigar el hacinamiento carcelario?

 

JCP: Frente al tema del Eln, este grupo guerrillero lo único que ha hecho ha sido generar muertos, violencia, destrucción del medio ambiente y violación de los derechos humanos de colombianos muy humildes en todas las partes del país. Nadie podrá olvidar que intentaron concertar un intento de fuga en medio de esta crisis y terminaron muertas 23 personas y hubo más de 80 heridos. Yo creo que el coronavirus, al final, no produce semejante cantidad de víctimas en el país como sí las han producido ellos.

Ahora bien, entiendo la medida del hacinamiento y que entre menos se presente hay más riesgo de contagio. Pero hay que tener mucho cuidado frente a quién se deja salir a la calle. Hay un montón de personas que están en la cárcel por homicidio, por terrorismo, por violación a menores y por violencia contra mujeres. Uno no puede permitir que salgan estas personas y simplemente terminen viviendo en mejores condiciones que muchos ciudadanos.

Tienen que tomarse las medidas que sean necesarias, de carácter sanitario al interior de las cárceles y los recintos carcelarios, pero si van a marcar casa por cárcel a un número importante de personas es importante que el Gobierno se asegure que sean personas que no son un peligro para la sociedad.