De continuar con las heladas en los departamentos de Cundinamarca, Nariño, Santander, Risaralda y Cauca, los precios de los alimentos podrían dispararse.
En buena parte del país se ven los cielos azules y las madrugadas heladas. Actualmente, el Ideam mantiene una alerta naranja por este fenómeno en el altiplano cundiboyacense, así como en algunos municipios de las regiones ya citadas.
¿Representará esto una amenaza inflacionaria para este año? Los analistas del Bancolombia indican que “nuestra opinión es que, en esta oportunidad, el efecto de las heladas en los precios de los alimentos perecederos será limitado. La tendencia reciente de incremento en la oferta de productos, contraria a lo que es usual en esta temporada, es el principal factor que sustenta nuestra perspectiva”.
Ante las heladas, en algunas partes del país se ha visto que los productores, sobre todo de papa, han adelantado la recolección del tubérculo, lo que hace prever que podría presentarse escasez a medianos de año.
Volumen
De acuerdo con la última información recolectada por el DANE en el Sistema de Precios e Información Agropecuaria (Sipsa), el volumen de alimentos ingresados a los principales mercados se incrementó en la primera semana de enero.
A nivel nacional, el crecimiento fue de 18% frente a los últimos ocho días del diciembre, principalmente por mayor oferta de frutas.
En Corabastos, que es una referencia relevante para las zonas más afectadas por las heladas, el aumento para el mismo periodo fue de 20%, e incluso el liderazgo de las frutas fue más pronunciado (50%). Asimismo, en este centro de abastecimiento los volúmenes observados para las frutas y los tubérculos en el arranque del año fueron más elevados que en la misma semana de 2019.
“Todo esto sugiere una evolución distinta a la que se presenta regularmente en enero, toda vez que la cantidad de alimentos abastecidos ha caído un 4% en los últimos 7 años. En ese sentido, actualmente pueden estar vigentes factores positivos en el ciclo de cosechas, que han incidido favorablemente en la oferta de alimentos. Dado lo anterior, la variación de los precios de este grupo del IPC luce mucho más moderada que en años anteriores”, señala el informe.
Estimaciones
Señalan el reporte, que “nuestras estimaciones preliminares, que incorporan los últimos datos del SIPSA, indican que durante las dos primeras semanas de 2020 la inflación de los alimentos estaría alrededor del 0,09% mensual. Las implicaciones de estos hallazgos sobre las expectativas de inflación serían significativas”.
Asimismo los expertos indican que “hace pocos días, el Banco de la República reveló en su encuesta mensual que los analistas proyectan para enero una inflación total de 0,57% mensual. Este pronóstico supone una la inflación de los alimentos (incluyendo la partida de restaurantes) superior al 0,8%”.
Ahora bien, si estos productos terminaran con un registro cercano al de nuestra estimación preliminar, la inflación de alimentos y restaurantes sería 0,56%, lo que conduciría a que la variación total del IPC llegara a 0,46%.
Lo que temen los investigadores y las incidencias de las heladas en el suministro de los productos, es que este fenómeno natural se prolongue con lo que el costo de vida, dada la incidencia del rubro de alimentos en la inflación, se incrementará notablemente en el primer semestre de este año.