Los gigantes bancarios estadounidenses JP Morgan Chase y Citigroup presentaron sólidas ganancias trimestrales especialmente por sus servicios de corretaje.
Las acciones de JP Morgan y Citigroup se dispararon luego que ambos reportaron un ostensible crecimiento en sus negocios con tarjetas de crédito mientras los consumidores siguen gastando durante las vacaciones invernales.
Los dos bancos también dijeron haber percibido una mayor confianza de sus clientes lo cual animó sus servicios de corretaje que se habían debilitado en los últimos trimestres.
“Lo que el cuarto trimestre mostró es la mayor claridad en los asuntos geopolíticos. Vemos muchos de eso en términos de confianza corporativa y perspectivas de buen crecimiento”, dijo el jefe financiero de Citigroup Mark Mason.
Además del mejoramiento de las relaciones entre Estados Unidos y China, Mason mencionó la disminución de la incertidumbre sobre el Brexit y el acuerdo de libre comercio alcanzado por Estados unidos, Canadá y México.
Citigroup apuntó un 15% de aumento de sus ganancias del cuarto trimestre a US$5.000 millones en tanto que los ingresos crecieron 7,3% a US$18.400 millones.
Empuje en China
En JPMorgan los ingresos netos subieron 20,6% a US$8.500 millones en los tres meses cerrados el 31 de diciembre. En ese período los ingresos crecieron 9% a US$29.200 millones.
Ese resultado ayudó al banco a lograr récords en ganancias y ventas anuales.
Su jefe ejecutivo Jamie Dimon dijo que pese a los complejos problemas geopolíticos, "la resolución de muchos asuntos comerciales ayudaron a los clientes y la actividad del mercado hacia el final del año."
Dimon destacó a China como un mercado en crecimiento e indicó que el año pasado JPMorgan se convirtió en el primer banco estadounidense autorizado a operar allí.
Tras esa autorización, planea contratar personal chino, especialmente para servicios corporativos y de inversiones y, en menor medida, para el manejo de activos y banca comercial, dijo Dimon.
"Tal vez las actividades comerciales sean un poco mejores o un poco peores, pero seguiremos exactamente ese mismo plan", afirmó.
Wells Fargo
Para Wells Fargo, el último trimestre del año pasado fue radicalmente diferente.
La ganancia neta del Wells Fargo bajó 55,4% a US$2.500 millones, debido en gran parte a gastos legales. Los ingresos bajaron 5,2% a US$19.900 millones.
Su nuevo jefe ejecutivo Charlie Scharf asumió en octubre con el objetivo de aplicar una nueva estrategia que permita al banco superar problemas.
Wells Fargo, un gigante en préstamos hipotecarios, está en dificultades desde 2016 cuando se descubrieron miles de cuentas falsas y la Reserva Federal le impuso límites a su capacidad de préstamos.
Scharf dijo haber identificado "claras oportunidades" para mejorar el desempeño del banco y la estructura de costos que "es muy alta".
Hay "muchas áreas en las que podemos aumentar nuestra tasa de crecimiento",dijo.
Mientras tanto, el banco estadounidense Goldman Sachs reportó una caída de ganancias en el cuarto trimestre tras opacos resultados y la reserva de US$1.100 millones por cuestiones legales.
El banco de inversiones anunció ganancias trimestrales de US$1.700 millones que son 25,8% menores a la del último trimestre del año previo.
Los ingresos subieron 25,4% a US$9.000 millones pero los gastos operativos aumentaron 41,7% a US$7.300 millones.
Goldman Sachs está discutiendo con fiscales estadounidenses un acuerdo sobre su participación en las operaciones ilegales de un fondo de inversiones en Malasia. El banco reservó US$1.100 millones para resolver sus pleitos.
Además de enfrentar mayores gastos por cuestiones legales, el banco vertió mucho dinero en los rubros compensaciones y beneficios y tecnología.
El banco fue castigado también con una caída de sus ingresos por asesoría financiera debido a la "significativa" merma de fusiones y adquisiciones de empresas.