Cuando se reía que los escándalos de las pirámides en el país era cosa del pasado, hoy la Superintendencia Financiera (SFC) ordenó la suspensión inmediata de las operaciones de “recaudo de dineros no autorizado” en la modalidad piramidal del “Telar de los Sueños”.
En la disposición de la entidad señala a María Nilse González Vásquez y a María Consuelo Camelo Pineda como las organizadoras, promotoras y receptoras de dineros por medio de esta modalidad ilegal promocionada en Bogotá.
La Superintendencia Financiera de Colombia -SFC ordenó a María Nilse González Vásquez y a María Consuelo Camelo Pineda suspender de forma inmediata las operaciones de captación o recaudo de dineros no autorizado en la modalidad de pirámide con el esquema “Telar de los sueños”.
Las mujeres que se vinculaban a este “Telar de los Sueños” entregaron un “regalo” cada una de $4.600.000 a la “mujer agua” que lidera su estructura, bajo la promesa de obtener en aproximadamente 30 días una ganancia por un total de $36.800.000, sin que se previera el intercambio de un bien o servicio.
A esta ganancia podrían acceder siempre y cuando invitaran cada una a dos personas más que pagaran la misma suma de dinero y éstas, a su vez, afiliaran a igual número de participantes hasta completar ocho mujeres en el nivel “fuego” requeridas para fondear el total de la suma prometida.
En consecuencia, la Superfinanciera también ordenó a las señoras María Nilse González Vásquez y María Consuelo Camelo Pineda, así como a las demás “mujeres agua” que han promovido y recibido el “regalo”, la devolución de la totalidad de los dineros que captaron sin autorización.
La Superintendencia Financiera remitió copia de la medida, entre otras autoridades, a la Superintendencia de Sociedades para la correspondiente intervención administrativa y a la Fiscalía General de la Nación con el fin de que se adelanten las investigaciones en materia penal.
Cómo funciona este esquema ilegal
Cada “Nave” (telar) se compone de 15 mujeres, distribuidas en 4 niveles (fuego, tierra, viento y agua), los cuales se completan luego de trascender en cada uno de los anteriores elementos, así: ingresa bajo la calidad de “mujer fuego” aportando $4.600.000 e invitando a dos mujeres más, quienes deben entregar la misma suma de dinero. Éstas a su vez se comprometen a reclutar a otras dos mujeres que aporten igual cantidad y así sucesivamente hasta alcanzar una progresión exponencial, de forma tal que los recursos que se captan le sean entregados a la mujer que llega al primer nivel “agua”.
Una vez la “mujer agua” recibe el “regalo” de las ocho mujeres fuego, se separa de la “Nave” convirtiéndose en “hermana guardiana”. Así, las dos “mujeres tierra” que la antecedían, automáticamente ascienden al “nivel agua” para conformar dos nuevas “Naves” (telares) de 15 personas y así sucesivamente.
En esta secuencia, la “mujer agua” inicial que sale de la “Nave” y se convierte en “hermana guardiana”, recibiría hasta $96.600.000 dentro de la actividad ilegal del “Telar de los sueños” que se identifica como “reciclaje”, impulsando a sus “mujeres fuego” para que completen 120 personas y cada una de ellas a más vinculados hasta llegar a 255 aportantes con un crecimiento exponencial.