A 10 meses de las urnas | El Nuevo Siglo
Jueves, 29 de Diciembre de 2022

* Coge ritmo precampaña para comicios regionales

* Se empiezan a prender varias alertas tempranas

 

 

A falta de diez meses para los comicios regionales y locales de 2023 es claro que ya en muchos departamentos, capitales y municipios está comenzando una tempranera precampaña que será muy difícil de ralentizar por más que desde distintos sectores se estén haciendo llamados a no arrancar tan previamente la actividad proselitista.

Como lo viene publicando este Diario, en las principales ciudades y gobernaciones ya es posible armar las primeras barajas con candidatos y precandidatos, algunos de los cuales incluso han confirmado sus intenciones de postularse e iniciaron correrías por las respectivas jurisdicciones.

A ello se suma que la mayoría de los partidos ha estado sentando en las últimas semanas las bases de su estrategia política y electoral. De igual manera, ya arrancaron sendos procesos para empezar a fidelizar o reclutar los mejores perfiles para competir por 32 gobernaciones, 1.101 alcaldías, más de 12 mil escaños en concejos municipales, 418 en asambleas departamentales y no menos de 6.814 ediles de las 1.040 juntas administradoras locales.

Como si fuera poco, hasta hoy tienen plazo de renunciar los congresistas que se vayan a postular a los ejecutivos y legislativos regionales y locales. Semanas atrás ese turno de dar un paso al costado para no inhabilitarse les correspondió a funcionarios públicos y contratistas con entidades oficiales.

En cuanto a las reglas del juego, ya está claro que la reforma al Código Electoral, que estaba enfocada en temas procedimentales, no podrá aplicarse a los comicios del 29 de octubre del año entrante. El proyecto volvió a ser presentado al comienzo de este primer tramo de legislatura e incluso luego se le sumó un mensaje de urgencia. Sin embargo, hubo mucha polémica a su alrededor, pese a que revivía mucho de lo aprobado por el anterior Congreso pero que luego ‘tumbó’ la Corte Constitucional. Al final, el debate se dilató y hasta le retiraron el mecanismo que obligaba a darle prioridad al trámite. En marzo seguirá en discusión, pero dado que irá a revisión previa de exequibilidad, no aplicaría para las elecciones regionales.

Y en cuanto a la reforma política, el proyecto ya logró superar los cuatro primeros debates y surtirá los restantes a partir de marzo próximo. Aunque tiene altas probabilidades de ser aprobado antes de junio, pese a las fisuras en la coalición oficialista, no se sabe cuáles de sus mandatos sobre transfuguismo político, listas cerradas, financiación estatal de campañas y otros ajustes polémicos podrán aplicarse para los comicios territoriales.

En lo que hace al operativo electoral, la Registraduría ya indicó que está firmando los respectivos contratos para el proceso de suministro de material electoral, así como de transmisión de los datos, mecanismos que ya han generado más de una polémica. A ello se suma que avanza el proceso de inscripción de cédulas y la organización electoral ha asegurado que no se repetirán yerros como el registrado en el preconteo de los votos para Senado en marzo pasado.

De orden público y seguridad todavía es muy tempranero para proyectar un escenario, pero es claro que viene en aumento el accionar de los grupos residuales de las Farc, el Eln, las bandas criminales de alto espectro, así como de organizaciones de delincuencia común y organizada. A diez meses de las urnas esta circunstancia ya obliga a lanzar una alerta temprana sobre la urgencia de evitar que la violencia amenace la tranquilidad y transparencia electoral.

Tras el escenario político dejado por las elecciones parlamentarias y presidenciales del primer semestre, resulta claro que los comicios de octubre del próximo año apuntan a ser un pulso por el poder regional y local sin antecedentes. El bloque de izquierda y centroizquierda que hoy comanda en la Casa de Nariño buscará dar un golpe de mano a los partidos tradicionales en departamentos y municipios que han dominado en estas últimas décadas. Será una competencia bastante reñida, que incluso podría estar marcada por coaliciones entre facciones de distinto sino ideológico, un alud de nuevos partidos y movimientos significativos de ciudadanos, así como el posible reencauche de precandidatos y candidatos presidenciales en aspiraciones a las alcaldías de ciudades capitales y gobernaciones.  

Como se ve, a diez meses de las urnas el escenario para las elecciones regionales y locales está empezando a construirse aceleradamente. La precampaña tiene varios flancos y en cada uno de ellos ya se está caminando con la mira puesta en la renovación del poder territorial en medio de una coyuntura política inédita. Hay muchos temas por concretar, empezando por las reglas del juego.