El conflicto en Irak | El Nuevo Siglo
Lunes, 30 de Junio de 2014

La invasión a Irak realizada por una coalición encabezada por EE.UU. que derribó al dictador Saddam tuvo éxito en este primer objetivo. No obstante la etapa posterior resultó más difícil. Las fuerzas de ocupación no lograron impedir los continuos atentados terroristas. Se dijo que antes de retirarse las tropas extranjeras se dejarían preparadas a las locales para enfrenter la violencia. No fue así. El primer ministro Nouri Al Maliki ha sido impotente frente a tan difícil manejo del poder en un país donde existen diferentes grupos religiosos. Además, de que se convirtió desde la invasión en laboratorio de terroristas de toda laya para realizar ataques con bombas.                     

Se recuerda que es un Estado de Asia occidental, situado al norte de la península de Arabia, con una salida estrecha al Golfo Pérsico. Se debe destacar su situación natural privilegiada, ya que está ubicado en una extensa llanura aluvial que bañan los ríos Tigris y Éufrates. El clima es subdesértico mediterráneo. La población está integrada por una mayoría de árabes y una minoría de kurdos, se ha multiplicado en los últimos 25 años y se concentra en la Baja Mesopotamia.

Al final de la II Guerra Mundial (durante la cual se produjeron rebeliones contra los ingleses) se hizo independiente y entró a formar parte de la Liga Árabe. Luego de la revolución de 1958 se instauró la República con el coronel Kassem como presidente. En 1963 el coronel Aref encabezó un golpe de Estado y Kassem fue fusilado. Fallecido Aref (1966) le sucedió su hermano Abdel Rahman Aref, quien fue derrocado por el golpe de Estado del general Al Bakr (1968). En 1972, después de muchos intentos, se consiguió aglutinar a todas las fuerzas políticas en un pacto nacional que incluía a los autonomistas kurdos y se decretó una amnistía general para los presos políticos.

En 1979 accedió al poder el presidente Saddam Hussein, quien encendió una guerra contra Irán, que se prolongó diez años, cuando hubo un alto el fuego. Posteriormente Hussein invadió  Kuwait, con el propósito de apoderarse de sus riquezas petroleras y resarcirse de este modo de las pérdidas de la guerra. Una coalición de países encabezados por Estados Unidos  y patrocinada por la ONU le infligió a Hussein una dura derrota, y la soberanía de Kuwait fue restaurada.

Ahora se halla Irak en difícil momento. Las fuerzas diversas pugnan por tener dominio. Y la división política estimuló el conflicto actual. Así lo reconoce el primer ministro Nouri al Maliki quien atribuye el actual conflicto en su país a una conspiración fraguada por yihadistas y miembros del disuelto partido Baas.

Pese a la polarización política, principalmente entre suníes y chiíes, Al Maliki afirmó que el proceso para elegir a los presidentes del Parlamento y del país, así como a un nuevo Gobierno "no está en peligro". Al Maliki desmintió que la mayoría de los voluntarios que van a luchar contra la insurgencia sean de confesión chií y adelantó que esos milicianos "se convertirán en el pilar del nuevo Ejército iraquí". También criticó a los medios de información de Catar y Arabia Saudí, por calificar supuestamente a los combatientes del EIIL de revolucionarios.
La invasión de Irak, entre el 20 de marzo y el 1 de mayo de 2003, fue llevada a cabo por una coalición de países encabezada por los Estados Unidos. Otros países estuvieron involucrados en la fase de ocupación posterior. La invasión marcó el inicio de la Guerra de Irak. Según el Presidente de los Estados Unidos, George W. Bush, las razones para la invasión eran "desarmar a Irak de armas de destrucción masiva (ADM) - Las cuales, nunca llegaron a encontrarse, ni su existencia quedar demostrada-, poner fin al (supuesto) apoyo brindado por Saddam Hussein al terrorismo, y lograr la "libertad" del pueblo iraquí.

Hoy las cosas son difíciles, y podría estarse ante el riesgo de una desintegración territorial de Irak.