Mujeres avanzan en jerarquía de Iglesia Católica | El Nuevo Siglo
El papa Francisco ha aumentado de forma significativa la participación de la mujer en roles claves de la organización del Vaticano. /AFP
Martes, 7 de Enero de 2025

Desde el mismo momento en que el papa Francisco fue designado como titular del Vaticano, en 2013, prometió que el rol de la mujer dentro de la organización eclesiástica y el día a día de la Iglesia Católica sería más valorado.

En sus más de once años de pontificado ha cumplido esa directriz, obviamente dentro de los cánones propios de la doctrina fundacional del catolicismo. El papel de las religiosas ha experimentado un fortalecimiento sin precedentes, así como su importancia en las distintas jerarquías y funciones de la confesión religiosa más extendida en todo el mundo.

Ayer el papa argentino dio un paso más en esa premisa de equidad de género. Por primera vez en la historia de la Iglesia Católica se designó a una mujer al frente de un “ministerio” en la organización del Vaticano.

Se trata de la monja italiana, Simona Brambilla, de 59 años, nombrada como prefecta del Dicasterio para la Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica. Es una de las dependencias más importantes dentro de la curia romana ya que es responsable de las órdenes y congregaciones religiosas.

Aunque generó sorpresa en algunos sectores, lo cierto es que la religiosa, quien se desempeñó como superiora general en Italia de las Misioneras de la Consolata, ya era la segunda a bordo de este dicasterio desde octubre de 2023.

Los conocedores de las movidas en el Vaticano la describen como una persona moderada y conciliadora, que tuvo además experiencia como misionera en África. También es enfermera y doctora en filosofía.

Sin embargo, así como hubo muchas reacciones en la feligresía apoyando esta decisión papal, no faltaron las voces que criticaron el hecho de que Francisco hubiera designado como “proprefecto” del señalado dicasterio al cardenal español Ángel Fernández Artime, ya que no está claro qué papel cumplirá y si tendrá algún poder o dirección sobre la gestión de Brambilla.

Más allá de esa controversia, lo cierto es que el tradicional modelo patriarcal del catolicismo se viene reformando, más aún en una organización eclesiástica en donde hay más mujeres que hombres. Obviamente, todavía hay mucho camino para que ellas puedan desempeñarse como sacerdotes. Sin embargo, según el sistema informativo del Vaticano, desde que llegó Francisco el porcentaje de mujeres que ocupan funciones en la Santa Sede y en la administración del Estado del Vaticano pasó de 19,2% a 23,4%. Incluso designó a dos religiosas en altos cargos: dirección de Museos y Secretaría general de la Gobernación.