La pandemia que llegó de improviso al país, no solo sorprendió a los colombianos sino que a muchas empresas. Unas se quedaron postradas esperando una solución a sus problemas, pero otras siguieron adelante en su transformación y reinvención. Ante esta situación, Santiago Botero, CEO de Finsocial, hizo un análisis denominado “De tormenta a Bendición”, donde reflexiona sobre este cambio.
Señala que “decidí hace meses denominar todo este episodio el corona-amigo y nunca volví a emplear el término ‘coronavirus’. ¿Por qué? Porque no todo es catastrófico y siempre habrá una luz. Y, en ocasiones, esa luz brilla incluso más que la que veíamos antes. Lo digo porque, en medio de tan difícil coyuntura, algunas compañías han salido fortalecidas y la nuestra, Finsocial, es una de ellas. De tal manera que para mí, el tal Cisne Negro es un animal deslumbrante que, con todo, también ha traído bendiciones y crecimiento”.
Explica el empresario que “nos vimos abocados a dar el gran salto digital, algo para lo cual, debe decirse, nos veníamos preparando”.
Sostiene Botero que “gracias a ello, los mercados financieros doméstico e internacional nos dieron un enorme voto de confianza para seguir creciendo. Más aún, gracias a esa confianza depositada en nosotros, nos hemos convertido en un aliado estratégico del Gobierno nacional y algunos gobiernos regionales para la irrigación de apoyos y alivios a ciertos segmentos de la población”.
Asegura que “al final del día, lo único que he pretendido plantear en estas líneas es que, en medio de una situación tan desafiante y peligrosa para la economía como la que atravesamos, la decisión para quienes estamos al frente de las empresas y nos hemos dado a generar empleos es nuestra, y solo nuestra: o sentarnos a llorar o vender los pañuelos. En Finsocial, como siempre, hemos optado por lo segundo. Gracias a Dios, esto nos ha permitido aprender, crecer y seguir sirviendo a los demás, es decir, transformar una tormenta en bendición”.