Los tratadistas económicos sostienen que uno de los principales síntomas de la marcha económica de un país es, precisamente, la alta o baja capacidad que tienen sus habitantes para generar ahorro de recursos económicos.

En ese orden de ideas, resulta muy interesante un estudio de Asobancaria, con ocasión de ser octubre el mes internacional del ahorro. Partiendo de la base de que falta mucho camino por recorrer, el reporte señaló que solo el 42% de los adultos ahorran o invierten, razón por la cual una de las metas es que a 2030 ese porcentaje llegue al 71%.

Para ello el gremio está reforzando sus programas, campañas, capacitaciones e iniciativas para recalcar la importancia de esta práctica, de forma tal que las personas sean cada vez más conscientes de las formas, beneficios e instrumentos que permiten un ahorro eficiente, seguro y adecuado para aumentar el bienestar financiero individual, familiar y colectivo.

De hecho, llama la atención que el top tres de las regiones que más ahorran esté encabezado por Bogotá, donde un 57,4% de su población lo hace; le siguen Cundinamarca, con un 46,9%, y Norte de Santander, con 46,4%.

En contraste, las tres zonas en donde menos ahorra la población son Boyacá, donde solo el 30% de las personas adultas lo hacen; Córdoba, con un 26,2%, y Chocó, con 25%.

En cuanto a edades, Asobancaria indicó que las personas que más ahorran están entre los 26 a los 35 años (53,9%) y los que menos lo hacen son los que tienen más de 56 años (30%).