El Directorio Ejecutivo del Banco Mundial aprobó una donación adicional por US$18,4 millones del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés) para el Proyecto de Conservación de Bosques y Sostenibilidad en el Corazón de la Amazonía, para la defensa de la biodiversidad y el medio ambiente en esa región de Colombia.

 Esta nueva donación permitirá fortalecer y ampliar las actividades del proyecto en curso, encaminadas a mejorar la gobernanza forestal, institucional y comunitaria, y promover un uso sostenible de la tierra a fin de contribuir con los esfuerzos de reducir la deforestación en la Amazonía colombiana.

 "El proyecto realiza una intervención integral en el territorio, teniendo como planteamiento esencial la conectividad ecosistémica entre diferentes áreas protegidas, territorios indígenas, estrategias complementarias de conservación y áreas para la producción sostenible”, afirmó Alberto Galán, director ejecutivo de Patrimonio Natural, entidad encargada de ejecutar la donación en coordinación con el Ministerio de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible y otras entidades socias. “Corazón de la Amazonia ha logrado constituir un proceso que ha permitido conectar la biodiversidad natural y biocultural, con las bases de un desarrollo sostenible para el país”.

 Según reportes del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM), en los primeros meses de 2020 se deforestaron unas 74,000 hectáreas de bosques amazónicos, lo que amenaza la biodiversidad en la zona, que es de importancia global, y la conectividad con la región Andina, fundamental para la provisión de servicios como la regulación climática y la oferta hídrica. El proyecto representa una intervención positiva, para contribuir en la protección de este territorio. En este sentido, el financiamiento adicional busca expandir las áreas de intervención y llegar a un mayor número de beneficiarios en el marco de un compromiso de colaboración de largo plazo.

 “Con este proyecto queremos contribuir en la reducción de la deforestación en esta importante zona del país, beneficiando a las comunidades locales y todos los colombianos”, dijo Ulrich Zachau, director del Banco Mundial para Colombia y Venezuela. “Es un privilegio poder hacer parte de este esfuerzo de conservación que integra a múltiples instituciones públicas nacionales y regionales, así como organizaciones de la sociedad civil y comunitarias”

El proyecto se inició en 2015 con una donación del GEF de US$10,4 millones, y posteriormente en 2017 recibió una nueva donación por un monto de US$12 millones no reembolsables.