Covid también ‘contagió’ la imagen de presidentes en todo el mundo | El Nuevo Siglo
Fotomontaje ENS
Domingo, 5 de Abril de 2020
Redacción internacional

Para algunos se ha desplomado en tanto que para otros ha crecido de forma favorable, claro está dependiendo de la forma como los ciudadanos perciben el buen o mal manejo que consideran se ha dado a esta crisis.

El impacto de la pandemia del coronavirus ha sido tan fuerte en todo el mundo que incluso la política no se salvó, pues entre otros efectos muchos congresos están paralizados o en el mejor de los casos intentan sesionar de forma virtual.

Sin embargo, lo que más llama la atención es la manera que ha influido en la imagen de los jefes de Estado, para algunos se ha desplomado en tanto que para otros ha crecido de forma favorable, claro está dependiendo de la forma como los ciudadanos perciben el buen o mal manejo que consideran se ha dado a esta crisis.

Entre los presidentes que la ciudadanía les ha reconocido el manejo y las estrategias que han adoptado para luchar contra el coronavirus está el colombiano Iván Duque, quien en una reciente encuesta subió en su imagen favorable, la cual en anteriores estudios venía de capa caída, especialmente, por el ambiente de agitación que el país presentó a finales del año pasado por marchas de protestas que exigían una serie de reivindicaciones sociales.

De igual manera, una encuesta que se conoció hace pocos días mostró que la mayoría de los ciudadanos aprueba la gestión del presidente Iván Duque a la crisis por la que atraviesa el país por cuenta de la Covid-19.

La aprobación al trabajo que viene haciendo el Jefe de Estado para frenar la expansión del coronavirus y la preparación del sistema de salud para la atención de los enfermos, así como las medidas económicas y sociales en favor de la población más necesitada, se da a pesar de la cuarentena que decretó entre el 25 de marzo y el 13 de abril, que si bien, la mayoría considera necesaria, es muy difícil de llevar por el encierro y porque muchos no tienen cómo financiarse en sus necesidades básicas.

 

Trump y Bolsonaro

 

Los presidentes de Estados Unidos, Donald Trump; de Brasil, Jair Bolsonaro; y de México, Andrés Manuel López Obrador, sostuvieron en un principio de la pandemia una postura negacionista porque desestimaron los estragos que podría causar en la población y no quisieron tomar medidas drásticas como el confinamiento que sí adoptaron naciones como España, Francia e Italia, pues apostaron a  que sus respectivas economías nacionales siguieran funcionando.

Trump hasta hace poco comparó el coronavirus con una gripe y señaló que a pesar de la muerte de unos 36.000 norteamericanos al año en promedio, “nunca se ha cerrado el país por gripe”.

Ahora que las críticas que en Estados Unidos crecen contra Trump por la forma como su gobierno ha manejado esta pandemia y que las autoridades prevén que morirán entre 100.000 y 240.000 personas en este país, el presidente norteamericano dice “no es gripe, es algo cruel”.

Las elecciones presidenciales en Estados Unidos se celebrarán en noviembre próximo, esa es una de las razones por la que expertos consideran que Donald Trump no quiso tomar medidas contra el coronavirus que pudieran frenar la economía norteamericana, pues el  millonario está de cuerpo entero buscando la reelección.

Algo parecido ha sucedido con el brasileño Bolsonaro, quien buscará la reelección en los comicios de 2022 y ha logrado en su año de gestión una mejoría de la economía del gigante suramericano.

Bolsonaro se ha mostrado partidario de las políticas de Trump, incluso en Brasil hay quienes dicen que quiere parecérsele. Sigue negando la gravedad de la pandemia y se ha mostrado abiertamente más partidario de proteger la economía que la vida de sus conciudadanos.

“Va a morir gente, lo siento, pero no podemos parar una fábrica de autos porque hay accidentes de tránsito”, expresó Bolsonaro.

Encuestas  han mostrado la desaprobación de los brasileños con la gestión del Bolsonaro en el manejo de esta crisis, situándolo  entre los últimos mandatarios de la región en un ranking, al lado de los presidentes de Chile, Sebastián Piñera; Ecuador, Lenín Moreno; y República Dominicana, Danilo Medina.

El caso de Lenín Moreno es uno de los más dramático porque con más de 3.000 casos es después de Brasil y Chile el país con más contagios en la región, en tanto que los fallecidos superan los 150.

El mandatario ecuatoriano no solo es mal calificado por las decisiones que ha tomado contra la pandemia que sectores políticos del correismo han calificado como tardías e ineficaces, sino que el Moreno tiene que cargar con el peso de un sistema de salud pública deficiente que no ha sido sustancialmente mejorado por su gobierno ni por los anteriores.

Aunque lo que más golpeado la imagen de Lenín Moreno es la crítica situación que se presenta en Guayaquil en donde se concentra más de la mitad de todos los muertos por coronavirus en Ecuador, y hasta el sistema funerario colapsó, al punto que se han visto imágenes dantescas de cadáveres en las calles.

 

Imagen favorable

 

En la otra cara de la moneda están mandatarios latinoamericanos que han sido muy bien calificados por la gestión que han adelantado contra el coronavirus, incluso mejor ranqueados que Iván Duque, como es el caso del presidente de El Salvador, Nayib Bukele, quien entre las medidas que adoptó priorizó el bienestar de los ciudadanos y les pidió a los empresarios aceptar perder parte de su riqueza.

También, entre los mandatarios mejor calificados, están los presidentes de Guatemala, Alejandro Giammatte; Argentina, Alejandro Fernández; y Perú, Martín Vizcarra,