El primer ministro japonés Shinzo Abe prevé declarar el martes el estado de urgencia durante un

El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, ha anunciado que el martes declarará el estado de emergencia, una medida sin precedentes en el país asiático, debido al significativo aumento de casos y de muertes a causa del Covid-19, en especial en ciudades importantes y densamente pobladas como Tokio y Osaka.

La medida dará poder a las autoridades locales para que lleven a cabo las medidas que consideren oportunas, como el cierre de escuelas y otros espacios públicos, así como decretar la cuarentena, si bien Abe ha insistido en que los expertos no consideran necesario el confinamiento total.

Abe ha explicado que el estado de emergencia afectará a siete de las prefecturas del país, entre ellas la de Tokio y Osaka, y durará en principio un mes, durante el cual se pedirá "la cooperación de todos los ciudadanos para minimizar los contactos entre personas".

El primer ministro, que ultimará los detalles de la medida el martes tras una reunión con expertos, ha asegurado que el transporte público seguirá funcionando y que su gobierno intentará salvaguardar las actividades económicas y sociales el mayor tiempo posible, según la cadena pública NHK.

La gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, y la Asociación Médica de Japón, habían pedido durante los últimos días a Abe que declarase el estado de emergencia. Tokio ha confirmado este domingo 143 nuevos casos de coronavirus, siendo así el mayor aumento desde que se inició la pandemia, lo que ha elevado el total de contagios en la capital japonesa a 1.033.

En total, Japón ha registrado hasta el momento 4.563 casos, incluidos unos 700 del crucero 'Diamond Princess', y 104 muertes.

 

Medida sin precedentes

La Dieta (Parlamento) de Japón aprobó a mediados de marzo ampliar la capacidad de Abe para poner en marcha el proceso por el cual establecer el estado de emergencia tras revisar una legislación previa promulgada en 2009 para hacer frente e la gripe porcina.

Hasta ahora, las recomendaciones y peticiones de Abe para que escuelas, lugares públicos, o grandes eventos deportivos y culturales fueran cancelados se habían estado emitiendo sin base legal.

Las autoridades han explicado que este aumento de casos podría deberse en gran parte a la llegada a Japón de personas contagiadas, por lo que el Gobierno ha prohibido la entrada de todas aquellos extranjeros que hayan estado recientemente en una lista de hasta 73 países.

 

Un billón de euros

Por otra parte, el Gobierno nipón ha anunciado un paquete de ayudas económicas por 108 billones de yenes (916.000 millones de euros) para combatir el impacto económico del coronavirus, equivalente a un 20 por ciento del PIB japonés.

El borrador de la iniciativa ha sido presentado este lunes al partido del Gobierno, el Partido Liberal Democrático, y su socio de coalición, Komeito. El martes será presentada la versión final del proyecto tras ser aprobada por ambos partidos.

La iniciativa incluye la compra del antigripal Avigan en dosis suficientes para tratar a dos millones de personas tras constatar las autoridades japonesas que esta medicina es efectiva para curar el Covid-19, según recoge la televisión NHK.

Igualmente prevé destinar unos 2.700 millones de euros a los hogares cuyos ingresos estén por debajo de un cierto nivel debido a la crisis. Igualmente se incrementarán los subsidios por hijo hasta 90 euros al mes para apoyar a las familias.

También se distribuirán cupones para fomentar el turismo y la industria del espectáculo cuando haya remitido la epidemia y las pequeñas y medianas empresas recibirán unos 18.000 euros. Los autónomos recibirán 9.000 euros en los sectores afectados.

mes en varias regiones, incluidas las de Tokio y Osaka, donde los casos de covid-19 están

 

aumentando considerablemente.

Sin embargo no aplicará medidas de confinamiento drásticas como en otros países porque las autoridades confían en la población para que respete las consignas.

 

¿Cómo funciona el estado de urgencia?

El estado de urgencia para casos sanitarios nació de una ley de 2012 con el objetivo de limitar la propagación de nuevas formas de gripe y fue modificada recientemente.

Este dispositivo solo puede ser activado bajo ciertas condiciones, entre ellas las que afectan a la rapidez de la propagación del virus y al impacto sobre la economía y la vida diaria.

Antes de declarar oficialmente el estado de urgencia, el primer ministro todavía tiene que consultar a un grupo de trabajo formado por expertos médicos y jurídicos.

Su aplicación afectara solamente a siete prefecturas (de un total de 47) donde la pandemia se propaga rápidamente, según los expertos médicos, y podría provocar la saturación del sistema sanitario.

Se trata de Tokio y sus regiones limítrofes de Chiba, Kanagawa y Saitama, de la región de Osaka y su vecina Hyogo (oeste del país) y de la prefectura de Fukuoka, situada en la gran isla del suroeste del archipiélago, Kyushu.

Hasta ahora, solo otra región (la isla de Hokkaido, que conoció un pico de contaminación en febrero), se vio afectada por el estado de urgencia pero había sido declarado por el gobernador sin base legal.

La medida duró tres semanas hasta que hubo una caída en el número de casos.

 

¿Qué permite el estado de urgencia?

Este estatuto refuerza los poderes de los gobernadores, que ahora tendrán la posibilidad de pedir a los habitantes limitar sus desplazamientos lo máximo posible. Algo que la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, ya empezó a hacer desde hace algunos días.

Las autoridades también podrán pedir a los comercios considerados no esenciales y que atraen a mucha gente (como los grandes almacenes o los lugares de entretenimiento) que cierren temporalmente.

Los transportes públicos continuarán sin embargo funcionando, incluso si la frecuencia debería disminuir, y la mayoría de comercios y servicios (supermercados, bancos, etc.) seguirán abiertos.

El derecho japonés, marcado por el estigma del período militarista hasta el final de la Segunda Guerra Mundial, carece de mecanismos coercitivos de la autoridad con la población.

Por eso es muy difícil para las autoridades locales sancionar a los que no cumplan las normas.

 

¿Qué puede imponer un gobernador?

Con el estado de urgencia, el instrumento más potente es la posibilidad de requisar si fuera necesario edificios o terrenos para instalar unidades de cuidados médicos.

Los gobernadores también podrán cerrar edificios públicos, como escuelas y museos. Sin embargo el gobierno ya pidió a finales de febrero el cierre de los establecimientos escolares a nivel nacional.

¿Qué piensan los japoneses?

Las autoridades apuestan por el civismo de la población y de las empresas. Numerosos habitantes de Tokio ya se organizaron para trabajar desde casa, lo que provocó una caída significativa del tráfico en los transportes públicos de la capital, normalmente llenos.

Según un sondeo el lunes para la televisión privada TBS, el 80% de las personas interrogadas son favorables al estado de urgencia.