PRELIMINAR, pero con la premisa de que ni Israel ni Hamás gobiernen la Franja de Gaza cuando termine el conflicto, Israel esbozó el plan de la posguerra para ese territorio palestino que ayer volvió a estar bajo intensos bombardeos.
El plan de del ministro de Defensa, Yoav Gallant, también rechaza que se establezcan allí asentamientos judíos.
Sus líneas generales se dieron a conocer el jueves, en la antesala del inicio de la gira del secretario de Estado estadounidense Antony Blinken empezó por la región y que tiene como objetivo lograr con los gobiernos árabes un compromiso para que la guerra de Israel contra Hamás no se extienda.
El futuro del territorio palestino está en el centro de las preocupaciones de la comunidad internacional, en medio de crecientes llamados para un alto el fuego.
Según Hamás, que gobierna Gaza desde 2007, las operaciones militares israelíes han dejado en casi tres meses 22.600 muertos. Además, gran parte del territorio ha quedado reducido a escombros y la ONU teme una crisis humanitaria con cientos de miles de personas desplazadas que lidian con el hambre y las enfermedades.
Los bombardeos continuaron durante la noche del jueves y la madrugada de ayer rn las zonas de Jan Yunis y Rafah, en el sur de la Franja, así como en partes del centro de Gaza, según corresponsales de AFP.
El ejército israelí señaló que sus tropas "golpearon a más de 100 objetivos" en Gaza durante las últimas 24 horas, incluidas posiciones militares, puntos de lanzamiento de cohetes y depósitos de armas.
Según el plan de Gallant, la guerra continuará hasta que Israel haya desmantelado las "capacidades militares y de gobierno" de Hamás, al que prometió "aniquilar", y liberado a los 132 rehenes que siguen en manos del grupo islamista. Se estima que al menos 24 de los 250 prisioneros tomados por Hamás murieron.
Una vez que Israel logre sus objetivos, un horizonte para el cual no hay un calendario establecido -- "comités civiles" palestinos comenzarán a asumir el control del territorio.
"Hamás no gobernará Gaza, (e) Israel no gobernará a los civiles de Gaza", aseguró Gallant, al presentar su plan a la prensa.
"Los habitantes de Gaza son palestinos. En consecuencia, entidades palestinas se encargarán (de la gestión) a condición de que no haya ninguna acción hostil o amenaza contra el Estado de Israel", agregó.
Rafah desbordada
Las condiciones de vida de los 2,4 millones de gazatíes son más que precarias, y Naciones Unidas calcula que hay 1,9 millones de desplazados.
Imágenes de AFPTV muestran a familias enteras que buscan ponerse a salvo de los combates, llegando a la ciudad fronteriza de Rafah en automóviles sobrecargados y a pie.
"Huimos del campamento de Jabalia a Maan (en Jan Yunis) y ahora estamos huyendo de Maan a Rafah", dijo una mujer que no quiso dar su nombre y añadió que "(No tenemos) agua, electricidad ni comida".
Un portavoz de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos declaró que Rafah está desbordada. "Allí viven por lo general 250.000 personas. Y ahora son más de 1,3 millones", señaló Adnan Abu Hasna.
Blinken aterrizó el viernes a Estambul, la primera parada de su gira, en la que tiene previsto discutir con los dirigentes israelíes "medidas inmediatas para aumentar sustancialmente la ayuda humanitaria a Gaza", adelantó el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
Además de Turquía y Grecia, Blinken viajará a Israel, el enclave palestino de Cisjordania y a cinco países árabes.