Trump se consolida en la punta electoral. Así va en estados bisagra | El Nuevo Siglo
DONALD TRUMP, líder republicano, mantiene ventaja en la carrera presidencial de Estados Unidos./Archivo AFP
Lunes, 5 de Febrero de 2024

A DIEZ meses exactos de la presidencial en Estados Unidos, el exmandatario republicano Donald Trump mantiene la ventaja que desde noviembre sacó al candidato-presidente Joe Biden tanto en la intención de voto a nivel nacional como en la mayoría de los estados bisagra (swing o púrpura), así bautizados porque son los que terminan definiendo al ganador de la Casa Blanca.

En Estados Unidos donde la elección no es directa ya que el voto popular es para elegir a los delegados de un Colegio Electoral de 538 miembros provenientes de sus 50 estados (reparto proporcional a su población) hay muchos en los que tradicionalmente se vota por uno de los dos partidos -republicano o demócrata- y esa tendencia se mantiene desde décadas atrás.

Así, hay estados rojos cuyos votos electorales generalmente son por el Partido Republicano, como por ejemplo, Kansas, Texas o Utah, mientras que los azules son de tradición electoral demócrata, a saber, California, Massachusetts, Rhode Island o el Distrito de Columbia. En tanto los estados ‘púrpura’, color definido por la mezcla de votantes rojos azules, son pendulares, es decir generalmente varían de una elección a otra y por ello son claves para definir el inquilino de la Casa Blanca.

Hace dos décadas se encasillaban en esta categoría siete estados, pero por motivos que van desde el desencanto de los ciudadanos hasta un voto más sopesado de los mismos ante las propuestas programáticas, éstos se han elevado a catorce.

Esta presidencial es tan inusual como inédita porque enfrentara a dos líderes que han sido presidentes de Estados Unidos, ambos investigados (el conservador con cuatro procesos penales y el demócrata con la posibilidad de un juicio político), con el inquilino de la Casa Blanca con una desaprobación de gestión que supera el 60% -el más bajo desde el segundo mandato de George W. Bush) y un electorado que tiene mayor confianza para el manejo de la economía en Trump (55%) que en Biden (33%).

Aunque ninguno de los dos ha sido proclamado oficialmente como el candidato partidario y se da por descontado que tras las primarias republicanas de Carolina del Sur, la exembajadora Nikki Haley de un paso al costado, es seguro que la presidencial de este 5 noviembre, que definirá al mandatario No.60 en la historia de Estados Unidos se dará entre Trump y Biden.

Pese a que el líder republicano enfrenta una ofensiva judicial que, según informes de diversos medios de comunicación fue sugerida por el propio Biden a comienzos de 2023 ante la posibilidad de que se frustre su reelección, no sólo mantiene el apoyo de su base partidaria, sino que la ha ampliado, especialmente en el grupo de jóvenes y afroamericanos, según coinciden en destacar diferentes analistas.

Así se evidencia desde mayo anterior, cuando en las habituales encuestas que realizan casi a diario diferentes firmas para los medios de comunicación se comenzó a mostrar un sostenido ascenso de Trump, al punto que en octubre igualó en la intención de voto nacional a Biden, semanas después lo sobrepasó y, actualmente, se ubica en algunos sondeos hasta con cinco puntos por encima.

Precisamente el más reciente es el de NBC News divulgado este 4 de febrero, que da al líder republicano 47% en la intención de voto contra 42% del mandatario demócrata.

Tomando la última semana (domingo a domingo), en seis de las diez mediciones realizadas la ventaja es para Trump, oscilando entre uno y cinco puntos porcentuales. 

ENs

 

En los estados bisagra

Cuando el 25 de septiembre pasado el sondeo realizado por ABC News y Washington Post reveló que Trump había picado en punta, marcando 52% frente a 42% de Biden si bien las alarmas demócratas se pusieron en rojo, confiaban en que esa ventaja sería efímera ante los problemas judiciales que enfrentaba el precandidato republicano.

Semanas después, exactamente a un año de la presidencial, la medición de Sienna College para The New York Times les impidió bajar el nivel de alerta ya que confirmó lo que temían: que el republicano mantenía intacto su apoyo electoral pero que, sobre todo, sacaba entre 3 y 11 puntos de ventaja a Biden en cinco de los siete estados bisagra (Nevada, Georgia, Arizona, Michigan y Pensilvania). El candidato-presidente solo se imponía en Wisconsin por dos puntos que, tomando el margen de error, representaba un empate técnico.

La tendencia este año se mantiene, según todas las encuestas realizadas no sólo en esos estados, sino en cinco más que también comienzan a considerarse bisagra por el cambio de opinión que han expresado los votantes en tales mediciones.

Tomando únicamente las realizadas desde el 31 de enero, Trump mantiene ventaja en Arizona, Georgia, Michigan, Nevada, Carolina del Norte, Ohio, Pensilvania, Wisconsin y Missouri. También se confirma en los estados “rojos”, mientras que Biden hace lo propio en los “azules” 

ENsEn resumen, según el promedio de encuestas de RealClearPolitics, Trump aventaja a Biden en Nevada por 7 puntos, Arizona (4,5 puntos), Michigan (5,1 puntos) y en Wisconsin (un punto).

Sobre Florida, que ha sido determinante en la elección presidencial, no hay mediciones, pero se especula que el que se lleve sus delegados sea el candidato republicano luego de la contundente reelección de Ron DeSantis, quien desistió de buscar la nominación y pidió apoyar a Trump, así como de los parlamentarios por ese Estado.

Sin descuidar al electorado de los ‘estados seguros’ (rojos y azules), las campañas centran sus mayores esfuerzos en los "estados bisagra", donde están en juego menos de un centenar de delegados al Colegio Electoral, (el mayor es Florida con 29), pero que son decisivos para que cualquiera de los dos aspirantes alcance la cota de 270 con los que se hace a las llaves dela Casa Blanca.

Es por este sistema que no siempre el que gana el voto popular a nivel nacional es el ‘elegido’ y que, como ocurre siempre, en varios de los “estados bisagra” se registra un cerrado duelo, por lo que la expectativa es hasta el último voto contado.

Vale aclarar que los compromisarios o delegados de cada estado votan en unidad por un candidato, excepto en Maine y Nebraska donde los apoyos de los votos electorales se reparten proporcionalmente al voto popular en lugar de otorgarse en bloque al candidato ganador.

Biden gana en…más plata

Rezagado en las encuestas, pero aventajado en un área importante está el candidato-presidente: la recaudación de fondos.

El principal comité de campaña de Biden comenzó 2024 con alrededor de 46 millones de dólares en efectivo disponibles, significativamente más que los 33 millones de dólares de Trump, según documentos de la Comisión Federal Electoral.

Si bien la diferencia no es enorme y la situación cambiará a medida que se surtan las primarias y se aproxime la nominación, es abismalmente diferente a la que se registró hace cuatro años cuando a estas alturas de la campaña el entonces presidente Trump contaba con más de 102 millones.

Los demócratas creían que tras el ‘fichaje’ judicial de Trump en el proceso que se le adelanta en Nueva York, iba a caer el número de donantes, lo que no ocurrió y, por el contrario, el merchandising republicano logró ingresar una importante suma por la venta de varios productos con esa imagen, inédita en la historia de Estados Unidos.