La Unión Europea (UE) sigue con aprensión los avatares políticos en Italia, cuyo desenlace puede reactivar la crisis de la deuda o dar lugar a un nuevo referéndum siguiendo el modelo del Brexit en Reino Unido.

"Si se organizan nuevas elecciones, será una votación sobre el modelo del Brexit", predice un ex dirigente europeo bajo cubierta del anonimato.

"No creo que el 32% de los italianos que dieron su voto al Movimiento 5 Estrellas (M5S) hayan votado para salir del euro", explica a la AFP.

La alarma sonó en Europa a causa de "la incertidumbre en cuanto a nuestra posición sobre el euro", argumentó el jefe del Estado, Sergio Mattarella, para justificar su rechazo a designar a un economista euroescéptico al frente del ministerio de Finanzas en el gobierno formado por la Liga (extrema derecha) y el Movimiento 5 Estrellas (M5S, populista).

La turbación estuvo reforzada por la publicación de un documento de trabajo de la coalición en el que estas dos formaciones políticas reclaman la anulación de parte de los aproximadamente 2,3 billones de euros de la deuda italiana.

El comisario europeo para el Presupuesto, el alemán Günther Oettinger, tomó la palabra en esta coyuntura. "Estoy inquieto y creo que en las próximas semanas las consecuencias para la economía de Italia podrían ser tan drásticas que esto podría ser una posible señal a los electores para no votar a populistas de izquierda y derecha", declaró el martes en una entrevista con la radio pública Deutsche Welle.

La declaración ha sido interpretada como una amenaza y ha provocado airadas protestas. El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, lo desaprobó y lo obligó a excusarse.

"Decirles a los italianos lo que tienen que hacer sería no comprenderlos y empujarlos más lejos hacia un rincón", estimó por su parte, este miércoles, el primer ministro de Luxemburgo, Xavier Bettel, durante un debate sobre el porvenir de Europa en el Parlamento europeo.

"Incluso mal citado, Oettinger expresa lo que muchos piensan sobre la zona euro. Pero está fuera de lugar teniendo en cuenta la complicada situación en Italia", confió Marco Giuli, politólogo del European Policy Center, un centro de reflexión en Bruselas.

Por otra parte, la formación de un gobierno liderado por el tecnócrata Carlo Cottarelli fue aplazado ayer en Italia para favorecer las negociaciones políticas entre las fuerzas populistas en un clima un poco más tranquilo por el repunte de los mercados financieros.

"Es el momento de las soluciones", declaró Luigi Di Maio, líder del populista Movimiento 5 Estrellas, tras proponer una personalidad "con el mismo carácter y valor" que remplace a Paolo Savona, conocido euroescéptico, vetado por el presidente de la República, Sergio Mattarella, para el cargo de ministro de Economía, lo que generó el caos político.

El exembajador de Estados Unidos ante la UE, Anthony Gardner, no obstante, advirtió ayer que "las políticas económicas irresponsables son siempre penalizadas".

Una salida de Italia del euro es considerada poco probable por los analistas europeos, pero "si se revelara una crisis, sería algo horrible, puesto que ninguno de los instrumentos de estabilización de la zona euro podría ser desplegado para salvar a Italia", advierten Silvia Merler, Olivier Blanchard y Jeromin Zettelmeyer en un análisis para el Bruegel Institute, otro centro de reflexión europeo.

La alianza entre la Liga eurófoba y el M5S, y su contrato de gobierno hacen que sea "difícil evitar una colisión con los mercados financieros y la Unión Europea", afirman estos tres analistas.