Estados Unidos quiere aumentar sus ventas de alimentos a Cuba y crear condiciones para el comercio bilateral, dijo el jueves la TV cubana citando al secretario de Agricultura Tom Vilsack que visita la isla.
Durante una reunión con su par cubano, Gustavo Rollero, en la sede del Ministerio de Agricultura, "Vilsack destacó que uno de los propósitos de su visita es explorar las oportunidades para que Estados Unidos exporte más productos hacia la isla", señaló el telediario local.
Vilsack, quien llegó el miércoles a La Habana, también "dijo que está muy interesado en establecer relaciones positivas de trabajo con Cuba y en crear oportunidades para que ambos países comercien entre sí", añadió el reporte de televisión.
Debido al embargo estadounidense contra Cuba, vigente desde 1962, La Habana no puede hacer exportaciones a Estados Unidos y solo desde 2001 puede adquirir en ese país alimentos y medicinas, que debe pagar por adelantado, mediante complicadas transacciones bancarias, y utilizar barcos extranjeros autorizados por Washington.
Esa condiciones no solo privan a los productores estadounidenses de un mercado cercano, de 11,1 millones de habitantes, que importa anualmente unos 2.500 millones de dólares en alimentos, sino que los pone en desventaja con los de otros países.
La Habana y Washington restablecieron en julio sus relaciones diplomáticas, tras medio siglo de ruptura, y el presidente Barack Obama ha pedido al Congreso que levante el embargo, a lo que se opone la mayoría republicana que controla el legislativo estadounidense.
Desde enero, Obama ha emitido decretos administrativos que remueven restricciones al comercio bilateral, las operaciones de empresas estadounidenses en Cuba y los viajes a la isla, pero el cuerpo legal del embargo continúa intacto.